lunes, 21 de febrero de 2011

Columnas


Sin Concesiones
Armando Patrón

HISTORIAS DE LADRONES
¿Qué se puede hacer ante tanta arbitrariedad y robo del Presidente Municipal de Chilpancingo Héctor Antonio Astudillo Flores, y su banda de secuaces enquistados en la administración del Ayuntamiento de Chilpancingo? ¿A quién acudir para frenar tanta arbitrariedad y saqueo?.
A pesar de la crisis económica que se padece a causa de años de gobiernos priistas que se han robado hasta los clips y lo poco que quedaba, el Presidente municipal Héctor Antonio Astudillo Flores, continúa empecinado en quitarle lo poco que le queda a los capitalinos, en empobrecer más a la gente, para poder pagar a todos los aviadores de su administración, para recuperar el dinero que desvío para la campaña de Manuel Añorve Baños.
El Ayuntamiento de Chilpancingo está hipotecado y la única manera de salvar la situación es aumentando los impuestos a los servicios básicos como el agua potable. El PRI perdió la capital debido a quien la gobierna ha sido incapaz de administrar como se debe los recursos del pueblo.
La capital está destruida y es la más sucia del estado de Guerrero, a causa de la frivolidad y la ambición vulgar de un personaje que llegó para enriquecerse. Llegó para llenarse de dinero los bolsillos, es un político que desgobierna, que se ha convertido en un vulgar ladrón, porque aumenta las tarifas de agua potable a su libre arbitrio, porque ha llenado de pobres las periferias de la capital por su ambición desmedida, y por querer recuperar todo el dinero que se gastó tratando de afianzar su carrera política caracterizada por el saqueo y la impunidad.
Y la situación es todavía más grave porque los diputados de los partidos diferentes al suyo han guardado un silencio cómplice, porque los regidores del PRD en el cabildo también son los más beneficiados, porque una parte del dinero que se le roba al pueblo va a parar a sus bolsillos.
El PRI perdió la capital en la elección pasada por culpa única y exclusivamente del corrupto alcalde de Chilpancingo, Héctor Antonio Astudillo Flores, porque la gente lo repudia y está en contra de sus políticas depredadoras, y el priismo perderá por primera vez la capital del estado, porque nadie quiere votar por un partido que les roba, que los saquea.
El culpable de la derrota de Manuel Añorve Baños, es Héctor Antonio Astudillo Flores, y es el principal traidor, y no los diputados que fueron a apoyar a Aguirre. Es responsable porque atentó contra la economía de su pueblo, porque se quiere robar todo lo que hay a su paso. Es un sinvergüenza.
Que bueno que Manuel Añorve Baños perdió la gubernatura, porque la carrera política del saqueador y de su banda de malandrines llegó a su fin. Ahora convertidos en viles cucarachas les espera el ostracismo, pero antes quieren recuperar algo de lo perdido, y pues el pueblo es el indicado. Una auditoría a su administración lo pondría en la cárcel, que es el lugar donde debería de estar.