martes, 15 de marzo de 2011

Cultura/social


Proyecto Pascua-Lama


Apolinar Castrejón Marino


Según cierta leyenda chibcha, un príncipe muy rico que vivía con su familia junto a la laguna Guatavitá en Colombia, era muy cruel con su esposa, la castigaba, ofendía y humillaba.
La mujer decidió acabar definitivamente con el maltrato de su esposo, y en un acto de entrega divina, abrazando a su hija se lanzó al fondo de la laguna. Pero el Dios de las profundidades no quiso que muriera, y la alojó en un palacio muy lujoso que se encontraba en el fondo del agua.
Al poco tiempo de estos fatales hechos, el príncipe se arrepintió de su conducta y fue a buscar a su esposa por todo el reino. Unos campesinos le contaron que ellos vieron como se hundía en la laguna. El príncipe lloró mucho porque creía que su esposa había muerto por su causa. Arrepentido y mortificado rezó por su esposa y por su hija, y tratando de desagraviarlas empezó a entregarles ricas ofrendas de oro y piedras preciosas.
Al principio de cada año, cuando eran sus cumpleaños y en sus aniversarios, se metía a las aguas con todo el cuerpo cubierto de polvo de oro y su manto real cuajado de piedras preciosas. Arrojaba su manto al fondo y bañaba su cuerpo para que el polvo de oro se fuera a lo más profundo donde estaba su esposa y su hija.
La historia de Estados Unidos tiene un capítulo muy importante dedicado a la “fiebre del oro”. El 24 de enero de 1848, en las cercanías del Río Americano en Coloma, en el rancho del general John Sutter, el capataz James Marshall y sus hombres construían un molino de harina cuando encontraron pepitas de oro.
Sutter quiso mantener la noticia en secreto, Sin embargo, los rumores se esparcieron rápidamente, y el 15 de marzo siguiente el periódico The Californian publicó la noticia. El director del periódico Brannan salió corriendo por las calles de San Francisco, con un frasco lleno de oro y gritando «¡....oro, oro! ¡Oro en el río Americano!».
Larga, interminable es la lista de anécdotas de la desproporcionada reacción de las gentes ante el oro, pasando por la mitología que cuenta sobre manzanas de oro, un vellocino de oro y un rey que transformaba en oro todo lo que tocaba. Es difícil expresar un juicio equilibrado ante la expectativa de poseer una mina o una veta de oro.
Barrick Gold Corporation es la transnacional minera dedicada a la extracción de oro más grande del mundo. En 2006, Barrick produjo 8,64 millones de onzas de oro a un costo de 282 dólares por onza y para 2007, entre 8,1 y 8,4 millones de onzas. Tiene su sede en la ciudad canadiense de Toronto y mantiene más de 27 minas operando en Estados Unidos, Canadá, Australia, Perú, Chile, República Dominicana, Argentina y Tanzania.
En 1994 Barrick Gold Corporation patrocinó una expedición hacia los páramos más inhóspitos de Chile y Argentina. Entre los fondos helados encontraron indicios de una gran veta debajo de los glaciares Toro I, Toro II y Esperanza, en el Valle del Huasco, San Félix y El Tránsito.
Para llegar a los grandísimos depósitos de oro, que han sido encontrados será necesario hacer 2 colosales huecos, cada uno tan grande como una montaña. El gobierno Chileno ya aprobó el proyecto al cual se le llamó PASCUA LAMA, pero en Argentina varios sectores de la población se están oponiendo al impacto ambiental de una alteración tan grave del ambiente antártico.
La destrucción de los glaciares debido a las perforaciones y la contaminación de los ríos debido al uso de cianuro y ácido sulfúrico que se usan en el proceso de extracción del oro, matarán los peces y todos los animales que beban esa agua. Los que no mueran, sufrirán enfermedades nunca vistas en la región. La agricultura y la ganadería desparecerán para siempre ocasionado hambre y soledad.
Como es obvio, hasta el último gramo de oro será enviado a la multinacional en el extranjero y ni uno le quedará a la gente a quien le ha pertenecido esta tierra por siglos.