miércoles, 25 de enero de 2012

PRIMERA PLANA


Roba al DIF y gritaba
Campos quiero hombre


Bonifacio Tejacal Coctecón.TIXTLA, GRO.—Al parecer en estado de ebriedad, alrededor de las dos de la madrugada del sábado, personalmente el alcalde priísta Jorge Luis Campos saqueó las oficinas del DIF del cual fueron testigos algunos comerciantes del mercado «Antonia Nava de Catalán» y añadieron que después gritaba en la plaza «quiero hombre».
Para cometer el presunto atraco, el edil, se hizo acompañar de dos de sus guaruras quienes cargaron con computadoras y muebles y para que no hubiera mirones del mercado, solicitó la presencia de elementos preventivos, tránsitos y de protección civil.
Alejandro Vázquez Flores, comerciante del mercado «Antonia Nava de Catalán», narró los hechos, y confirmó que el alcalde priísta Jorge Luis Campos Espíritu, que estaba pasado de copas que hasta no se podía parar, que finalmente sus guaruras lo tuvieron de cargar como a los muebles saqueados hasta la puerta de las oficinas del DIF municipal.
Los guaruras con mayor rapidez saqueaban algunas cajas al parecer contenían computadoras y algunos muebles, en tanto el presidente Jorge Luis Campos Espíritu, en un lapso de 15 minutos se paró en la plaza cívica para insultarlos de manera verbal y con palabras obscenas se dirigía hacia ellos, «(quiero hombre, quiero hombre) alcancé a escuchar que decía el presidente municipal» revela Vázquez Flores.
En tanto que los guaruras llamaban vía radio, solicitando refuerzos para desalojar a unos 30 comerciantes inconformes que observaban el robo que estaba cometiendo el presidente, Jorge Luis Campos Espíritu.
Hasta el lugar arribaron 6 camionetas de policías preventiva, protección civil y tránsito municipal, quienes recibieron órdenes directas del presidente para desalojar a los comerciantes que mantienen el plantón adentro de las áreas verdes del mercado «Antonia Nava de Catalán», explica Alejandro Vázquez Flores.
Sin embargo los uniformados hicieron caso omiso a la petición del alcalde porque se encontraba en estado de ebriedad, casi sin poder hablar bien.
Apuntó, que los comerciantes hicieron caso omiso a dicha agresión pues el alcalde, se había transformado de manera total con el alcohol que había consumido, y eso, lo hacía que se expresara de esa manera.

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