PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

JLCyA: 600 denuncias

al año por despedidos

Tino Gatica/Colaboración Especial.-En la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA) la mayoría de los casos que se atienden son favorables a quienes demandan, registrándose de cinco a diez demandas por día, menciona el titular de la Representación de Trabajadores (y trabajadoras), Gabriel Guerrero Gómez.

Señala el responsable de esa área que en la JLCyA se imparte la justicia por igual, siempre dentro del marco legal, añadiendo que «nuestra labor es la de cuantificar la cuantificación a la que tiene derecho el trabajador y aplicar la ley».

Esta dependencia que tiene sus oficinas en el centro de la ciudad capital, actualmente depende de la Secretaría General de Gobierno, pues antes era de la Secretaría de Desarrollo Económico, aunque su función de competencia sigue siendo la misma: defender, asesorar y tutelar a las y los trabajadores que así lo solicitan.

En cuanto a esa cantidad de demandas entabladas por el agraviado o agraviada, señala el titular de la RT, Gabriel Guerrero Gómez, que por día se reciben de cinco a diez demandas, «por año (desde que él empezó hace cuatro años aproximadamente) iniciamos con 50 anuales y últimamente contabilizamos 600 demandas. De esta cantidad (600 al año) por lo regular quienes demandan siempre tienen la razón».

Los argumentos de quienes solicitan la tutela de la JLCyA se deben a despidos, rescisiones (de contrato laboral) y en ocasiones son liquidaciones voluntarias. Por cuanto toca a casos de denuncias por acoso laboral, «aquí no se han presentado esas quejas en específico, pues vienen contempladas que (mujeres se infiere) en sus empresas se separan porque son acosadas en su trabajo; pero son pocas denuncias».

Por cuanto corresponde a quienes son demandados, señala Guerrero Gómez, ante la representatividad que tiene, «por lo regular se acuerdan pactos de voluntad; se concilian entre ambas partes, nunca hay presión para que el demandante acepte cierta cantidad».

Y por lo regular el demandante siempre viene con su abogado de confianza, dice el representante de las y los trabajadores, «se mete demanda, se radica y nosotros le damos curso legal; o, cuando no trae un abogado (o abogada), se le designa a un procurador que tenemos de oficio, adjunto».

Finalmente, Guerrero Gómez, envía un exhorto a que quienes tienen a personal que sean conscientes de las necesidades de éste, a que los consideren como parte de su éxito y les den buenas atenciones; por lo que toca a quien demanda también les hace el exhorto de que actúen con seriedad y honestidad, así como invitar a todo trabajador o trabajadora de cualquier empresa o negocio a que si tienen dudas sobre las funciones que ofrece su representoría, que los visiten en las instalaciones de la JLCyA, ofreciéndoles la confianza de que serán atendidos o atendidas recibiendo asesoría y orientación en esa relación patrón-obrero.