COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez

 **Culminó el curso de ortografía dirigido a periodistas… **Muchos son «señoreslicenciados» en Ciencias de la Comunicación…

Ahora que CULMINÓ EL CURSO DE ORTOGRAFÍA, DIRIGIDO EXCLUSIVAMENTE A PERIODISTAS e impartido por un catedrático de la Universidad Autónoma de Guerrero, UAG,

«La alegría de escribir sin H. errores», se presupone que ya tenemos a 45 comunicadores «bien chipocludos», a los que ya no va a ser necesario que, el corrector del medio para el que «escribe», se entretenga revisando sus textos, por lo que habrán de pasar de «bay», pues habrá «cero errores»; como quien dice, ya no encontraremos «obras con H», ni textos mal intencionados; es decir, sin «horrores» gramaticales, como suelen encontrarse en las publicaciones locales, más en la nota roja, como cuando informan que «encontraron el cadáver del muerto», con el consabido «suyo de él»; desafortunadamente, como decían mis maestros de antaño: «Les entra por una oreja y les sale por la otra»; esto es, hay varios reporteros que acudieron con entusiasmo a recibir el Curso-Taller, impartido por el maestro Eladio Castro Aguilar, que de nada les sirvió y no es que sean unas verdaderas «lumbreras» en el «rollo» de la redacción, sino que pareciera que todo lo que Castro Aguilar intentara enseñarles –o recordarles –pasó como un fantasma por sus cabezas, de otra forma no encontraríamos sustantivos comunes escritos con mayúscula; estamos seguros que el maestro Eladio debe de haberles dicho que, cuando el nombre de un funcionario va precedido de su cargo, este último se escribe con mayúsculas, o que «dirigente» debe de ser con minúsculas, o como se dice en el argot periodístico: «Escribir en altas y bajas»; nosotros recordamos que hace un buen tiempo propusimos la implementación de un buen curso de ortografía, pues se habían detectado tremendos errores en la escritura de las palabras, y hasta errores de gramática, en las publicaciones que leíamos los guerrerenses; sin embargo, la dirigencia de los «tundeteclas» nos lo tomó a mal, pues el gremio se ha hecho a base de golpes, picando piedra, MUCHOS SON «SEÑORESLICENCIADOS» EN CIENCIAS DE LA COMUNICACIÓN y no era posible que un simple profesor de primaria les hiciera ver sus errores ortográficos; ¡¡¡Era el colmo!!!, sino al contrario, ellos –los periodistas –bien pudieran ir a las escuelas a impartir un curso del buen escribir; la idea tuvo que ser desechada y seguimos leyendo escritos con repetición de palabras, errores de escritura, ideas vagas y párele de contar; claro está, nadie está exento de tener un desliz gramatical, eso ni dudarlo; máxime ahora que hicieron una serie de reformas en la escritura del Español, por los grandes «chipocludos» de la Real Academia de la Lengua Española, RALE, que prácticamente decretaron la desaparición del acento diacrítico y el acento enfático; por si no lo recuerdan, «El acento diacrítico es el que se usa para diferenciar el oficio gramatical de dos palabras que se escriben y pronuncian de igual manera, pero que expresan distintas ideas. Las palabras monosílabas no se acentúan. Sin embargo, hay palabras monosílabas que representan dos clases distintas de palabras con significados y funciones diferentes. Por esta razón, es necesario acentuarlas o utilizar el acento diacrítico, con el propósito de diferenciarlas» y el acento enfático «se usa para marcar el énfasis en las oraciones admirativas e interrogativas; el acento enfático no cambia el significado de las palabras acentuadas», reglas que causaban mucho escozor en los escritores y por eso la RALE, decidió darles «cran»; en fin, esperemos que los mismos periodistas revisen sus textos y se corrijan a sí mismos, de otra forma, de nada servirán mil cursos de ortografía impartidos por los mejores maestros que existan en el mundo, si las cosas siguen igual o peor y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com