POLICRONICA

Abandono…La milenaria ruta interminable, viene y van gobiernos, nadie termina de construir lo que los habitantes de la región esperaban se terminara de construir los 167 kilómetros que sería para comunicar la montaña y la Costa Chica, se ha traducido en corrupción y Angel Heladio Aguirre Rivero sin ningún interés por invertir.

La ruta Tlapa de Comonfort- Marquelia, no es de ahora, sino desde hace miles de años, pero es un proyecto interminable, lo que se sabe, sin embargo habría que ir a la época de la Colonia, pues para descender de la montaña hacia la playa del Oceáno Pácifico se comunican pueblos de los municipios de Malinaltepec, Metlatlónoc, Atlamajalcingo del Monte, Zapotitlán Tablas, rematando con San Luis Acatlan. Para cruzar ese camino, se llega hasta los 4 mil metros sobre el nivel del mar, inclusive puede uno disfrutar de la verdadera naturaleza y a distancia se observan muchos pueblos. Cuando tuvimos la oportunidad de recorrer esa vía en construcción, pudimos constatar que es un camino agreste y se habían iniciado los trabajos, por una demanda sentida ancestral de los indígenas, de por lo menos revivida hace medio siglo, era necesario contar con una carretera que rememora las rutas comerciales de los yopes y tlapanecos durante la epoca de la colonia. En la parte más alta de La Montaña hay bosques con espesura de la niebla, y con grandes desfiladeros que se contemplan soberbios pinos, encinos, y ya muy cerca del mar la vegetación se vuelve selvática, los arboles menos serios y más exhuberantes. Hay burceras, acacias y mangos, hasta llegar a las palmeras de la costa de Marquelia, ahora convertido en cabecera municipal, antes era solamente una comunidad o punto de referencia para llegar al Océano Pacifico. Hasta donde tenemos conocimiento las últimas gestiones para hacer realizadad el proyecto comenzaron por allá en 1970, a fin de que se construyera la carretera de 167 kilómetros y para desgracia, se ha convertido en una carretera en pésimas condiciones: enormes boquetes y muchas rocas vuelven a algunos tramos prácticamente intransitables. El problema se vuelve más grava en temporada de lluvias, se presentan muchos derrumbes, mucho lodo, se caen piedras y prácticamente hay días en que no se puede pasar, la gente queda incomunicada. ¡Claro que hay muchísimos accidentes porque está mal la carretera!». Desde el inicio de construcción ha sido un motivo de enriquecimiento vergonzante de los empresarios, de los gobernantes. La peor de la historia, que cuando llega un gobernador perredista a dirigir los destinos de Guerrero, llamado Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, fue como una maldición amarilla, se olvidó en definitiva, y parece que es lo mismo que ahora se está repitiendo con el segundo perredista, prófugo priísta, llamado Angel Heladio Aguirre Rivero, porque lleva 15 meses de gobernador y no ha regresado siquiera a engañar nuevamente a nuestros hermanos indígenas, solamente cuando andaba de pedigüeño del voto entonces se desvío por ese camino para llegar a San Luis Acatlán y a su tierra natal Ometepec. Recordamos que en 1997 se reactivó de manera oficial el viejo proyecto, y se rebautizó rimbombantemente como Carretera Interoceánica Veracruz-Puebla-Tlapa-Marquelia. El presidente de la república de esa época se comprometió a terminar el trazo y el recubrimiento, e incluso se aprobaron recursos para completar los primeros 38 kilómetros de carretera de los 167 proyectados. Al disparejo desarrollo económico de Guerrero, los gobiernos no le han dado la importancia de consolidar la conexión entre los pueblos de la montaña y la Costa Chica suriana. Quienes hemos tenido la oportunidad de transitar por esa larga vía montañosa, hemos conocido muchas historias de accidentes por el mal estado en que se encuentra la carretera Tlapa-Marquelia, que se ha vuelto interminable, gracias a la corrupción. Habría que rememorar que en 2004, el entonces presidente de la República, el panista Vicente Fox Quezada, acudió a esta zona para inaugurar la vía, los tramos que se construyeron al principio ya estaban seriamente dañados, por eso, el mandatario prometió que habría un presupuesto especial para realizar todas las reparaciones necesarias, adicional a los 338 millones que se invirtieron en total. Recibió muchos agradecimientos de la gente, pues por vez primera un presidente ofreció atención para esta obra que resulta estratégica para más de 80 mil indígenas de seis municipios de La Montaña y Costa Chica. Desde aquel entonces, ya no hemos sabido de más inversiones millonarias, inclusive cuando fue diputado federal por el PRD por el quinto distrito, Víctor Aguirre Alcaide, ahora virtual coordinador de la bancada de diputados locales y casi presidente de la comisión de gobierno de la LX legislatura a partir del 13 de septiembre de este año, le habían preguntado algunos campesinos de que si podía hacer algo como legislador federal para rescatar el camino, que estaba triado y abandonado, y como siempre, en una actitud de valemadrismo, habría contestado «no nos hacen caso, ni a nosotros los diputados nos hacen caso». Ahora que llegue a dirigir el Poder Legislativo de Guerrero y teniendo muchos intereses en la región de la montaña, ojalá que Aguirre Alcaide se acuerde que tiene un compromiso con la región y si no tuviera esos cargos, de todas maneras como diputado plurinominal de la LX Legislatura puede abrir su boca y gritar de vez en cuando que se atienda esa carretera, que ya se termine al ciento por ciento y sea disfrutada por los habitantes de esas dos regiones. Es una obra carretera interminable, pese a que cuenta con tramos transitables, se perciben la historia del aislamiento, la pretensión frustrada de llegar al mar. El gobernador Angel Heladio Aguirre Rivero, definitivamente en 15 meses de su gestión, no ha tocado el tema, pese a que es una zona importante para el estado de Guerrero ….¿Bruja?.... Por su aspecto, podríamos decir que se trata de una bruja, pero por sus acciones, es una deshonesta desde que estudió, y ahora sus compañeros la acusan de ladrona de las cuotas sindicales y hasta de bruja. Este breve perfil, es de Beatriz Vélez Núñez, quien inicialmente estudió enfermería de tres años, que al paso de los años se convirtió en carretera técnica, después se incorporó a trabajar a la Secretaría de Salud, y utilizando su tiempo que le quedaba estudió, no se sabe si terminó, la licenciatura en derecho en la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG). Pero como su carrera inicial como enfermera, ya no alcanzaba para tener su clave presupuestal como enfermera general, del hospital «Raymundo Abarca Alarcón», pues las condiciones de trabajo de la Secretaría de Salud habían cambiado y la obligaron a estudiar la licenciatura complementaria en enfermería para los que estaban en servicio, y para conservar su salario, se vio obligada a revalidar materias en la generación 2007-2009, pero como toda una deshonesta, dos meses antes de terminar el ciclo escolar, desapareció, ya nunca regresó a las clases. Pese a no haber terminado, al parecer entregó un dinero a cambio, y finalmente le entregaron su título ya como «licenciada en enfermería» y de ahí buscó la secretaría general de la sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la secretaría de Salud (SNTSSA), encabezó la planilla «Oro», y como era enfermera, muchas y muchos de sus compañeros de trabajo del «Raymundo Abarca Alarcón», la apoyaron con todo lo que podían, porque tenían el firme convencimiento que al momento de arribar como lideresa, obtendría beneficios laborales. Sin embargo pasaron los tres años de lideresa, nunca regresó siquiera a visitar a sus viejas compañeras, sino que fue hasta el sábado, cuando llegó otra vez en donde ha sido muchos años su centro de trabajo, pero no a resolver los problemas que son muchos los que padecen, entre ellos el cambio del hospital del centro a otro municipio en el punto conocido como «Tierras Prietas», pero ya en el municipio de Eduardo Neri, que en automático, deben cambiar las claves presupuestales, sino a solicitar su apoyo, con el mismo nombre de la planilla «Oro». Pero en esta ocasión recibió el rechazo y hasta abucheos, porque la compañera «Bety» decían sus colegas de jornada acumulada, «ahora si se acuerda de nosotros». Como una verdadera cínica, y utilizando los recursos de las cuotas sindicales, este martes por la mañana, solicitó su registro para reelegirse como secretaria general, para ello se dio el lujo regalar playeras impresas tipo «Polo», lo que no pudieron hacer los otros dos contendientes. Desde esta fecha y hasta un día del ocho de agosto cuando se lleven a cabo las elecciones para renovar el Comité Directivo estatal de la sección 36 del SNTSSA, harán campaña las tres planillas «Rosa» y «Naranja» y a diferencia con estas, la «Oro», está cuestionada por su mal desempeño a favor de la base trabajadora, por lo que anticipan que será derrotada en las urnas, pero desconfía que recurra a sus artimañas de facinerosa y bruja, porque uno de sus compañeros de trabajo Alejandro Ramírez Alarcón, empleado de la jurisdicción sanitaria centro denunció que Beatriz Vélez Núñez actual secretaria general de la sección 36, que en el mes de junio del 2009 se quejó con ella, puesto que había encontrado a las doce del día debajo de su escritorio de trabajo una vela negra con alfileres y sangre, supuestamente era brujería negra. Pero luego de indagar quienes habían hecho esa «brujería» descubrió que los autores de esto, eran sus protegidos, por lo que nunca les llamó la atención, por ende quedó en la impunidad. Entonces ahora que busca reelegirse, definitivamente este servidor público de la salud, y muchos más que agravió Vélez Núñez, desde ahora le anticipan su repudio y no van a emitir votos a su favor. Como una verdadera cínica, dice que no es reelección, sino que se trata de una ampliación a su periodo. Hasta el momento la mayoría de los casi 4 mil trabajadores del sector salud, no saben del paradero de sus cuotas sindicales, por lo que presumen que se está haciendo rica. Además utilizó los dineros del sindicato, para financiar parte de la campaña de su compañera de formula a senador de la república la desconocida priísta Claudia Ruiz Salinas, que finalmente el primero de julio fueron derrotadas por los machines amarillos. Con una estela de corrupción, la sinvergüenza Beatriz Vélez Núñez quiere seguir viviendo de las cuotas sindicales, cuando ya debería retornar a su centro de trabajo del hospital general «Raymundo Abarca Alarcón».