ARTICULO

A raíz de la creación 

del estado de Guerrero 

Margarito López Ramírez

 ...Integrantes del Grupo Solidaridad Acapulco visitamos La Providencia, hacienda enclavada en una estribación de la Sierra Madre del Sur. Conocimos el lugar y los vestigios de la edificación que habitó quien fue, al instituirse el Estado de Guerrero, primer Gobernador de manera provisional en octubre 27 de 1849, y, constitucionalmente, por decisión del H. Congreso local el 15 de enero de 1852, Asimismo, Presidente de la República Mexicana el octubre 4 de 1855. 

Lo primero que divisamos fueron vestigios de una construcción que se yergue a manera de vigía portentoso en las inmediaciones de un pueblo hermoso situado en una pequeña planicie protegida por elevaciones montañosas que descuellan entre lomas y barrancas en los que hay oyameles. 

Y junto a ésta una escuela en cuyo explanada se levanta el sitial erigido al héroe que, como lo afirma el Dr. Jaime Salazar Adame en el libro «JUAN ÁLVAREZ HURTADO, cuatro ensayos»: fue soldado de Morelos, combatiente al lado de Galeana, hermanado con Vicente Guerrero en las montañas de sur, quien sobrevivió la época de la inestabilidad política, de gobiernos frustrados, de guerras perdidas, para encabezar él mismo el estallido de Ayutla plan político provocado  por la dictadura de Antonio López de Santa Anna, propiciando que se abrieran las puertas para la promulgación de la Constitución de 1857, que dio curso a la reforma progresista de Benito Juárez. 

… Estar en la Providencia, Guerrero nos llevó a un ejercicio evocativo en torno a lo escuchado o leído referente al General Juan Álvarez Hurtado, hijo del español don Antonio Álvarez originario de España y de doña Rafaela Hurtado oriunda de Acapulco. Nos trasladamos a los tiempos cuando en nuestra condición de escolapios se nos enseñó: a unos, que fue originario de Los Arenales, y a otros que su tierra natal fue Atoyac. Esta diversidad motivó que se citara lo asentado por María Teresa Pavía Miller  en su ensayo Juan Álvarez Hurtado, ¿mestizo o pardo? del volumen bibliográfico citado, quien, con pulcritud literaria e histórica, describe que mientras que en el testamento del General Juan Álvarez se asienta que fue originario de de Atoyac, en el decreto del 7 de febrero de 1961 se afirmó que había nacido en Santa María de la Concepción Atoyac, hoy Arenal de Álvarez municipio de San Jerónimo de Juárez. La autora en comento también atrae en su texto lo expresado por Clyde Gilbert Bushnell en su obra La carrera militar y política de Juan Álvarez, en lo que dice: «… nació el 27 de enero de 1790, en el barrio de la Tachuela en el antiguo pueblo de Santa María de la Concepción de Atoyac, ahora Ciudad Álvarez…»  

Enterados de ese haber histórico que ronda en rededor de la vida del héroe, cada uno de nosotros guardó lo que a nuestro juicio consideró apegado a la verdad, y nos dispusimos a proseguir nuestro camino. Impregnados de fervor patrio, imaginamos al General Álvarez Hurtado inmerso en sus ahíncos para impulsar los anhelos libertarios en el sur mexicano, supusimos sus esfuerzos para idear proyectos constructivos que hermanó al pensar y hacer  de otros líderes de la región, conjeturamos cómo pudo haber sido su existencia entre la gente de los pueblos que lo admiraba y respetaba, cómo su actitud leal de liberal que junto con otros próceres llevó a la anhelada erección del actual Estado de Guerrero, y hasta se llegó a pensar en cómo habrán sido sus momentos en los que deliberadamente se retiraba de sus obligaciones gubernamentales para trabajar su hacienda La Providencia en donde el destino marcó su meta terrenal el 21 de agosto de 1867.