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Garantiza el CECOFAM

derechos de los niños:NM 

 Que «los derechos de los niños en la entidad están garantizados, a través de los servicios psicológicos, médicos y de atención especializada, que ofrece el Centro de Convivencia Familiar (CECOFAM), gracias al rápido crecimiento que en los últimos 20 meses se ha concretado en el  Poder Judicial del Estado de Guerrero», aseguró Claudia Ibet Navarrete Mendoza, directora de la Unidad de Atención Jurídica Integral (UAJI).

Explicó que el CECOFAM –creado y ubicado en Acapulco- tiene como esencia brindar atención no sólo jurídica, si no emocional (personalizada y adecuada), a los niños y adolescentes cuyo seno familiares atraviesa un proceso de separación de los padres, y donde son evaluados y atendidos cálidamente por especialistas con funciones específicas, fijadas ciertamente en un  reglamento interno, que sienta las bases de organización y su óptimo funcionamiento.

Navarrete Mendoza, destacó el apoyo del magistrado presidente del Tribunal superior de Justicia, Jesús Martínez Garnelo,  «quien de manera considerable, a través del Consejo de la Judicatura del Estado, nos brindó su respaldo con la aprobación de dicho reglamento y su enorme visión para ampliar la cobertura de servicios del CECOFAM»..

EXTENDERÁN SERVICIOS DE CECOFAM A IGUALA Y CHILPANCINGO. 

Indicó que están a punto de crearse estos Centros de Convivencia con sede en Chilpancingo de los Bravo e Iguala de la Independencia: «lo que por supuesto va a permitir garantizar el acceso a la justicia a todas aquellas familias que transitan por un proceso de separación o divorcio ante los juzgados familiares, en estas regiones».

Mencionó además que se logra darle mayor amplitud «gracias a la gestión del doctor Martínez Garnelo, quien hizo la sala Familiar. Ahorita en el pleno de la sala, los magistrados, cada día están requiriendo nuestra participación en las diligencias que realizan con familiares, niños y familias inmersas en alguna controversia».

Agregó que están por cumplir tres años, sin embargo en este último han crecido considerablemente, pues además de la creación del reglamento «vamos a tener nuestro sistema informático de control de gestión, con el que todas las acciones de los psicólogos, trabajadores sociales, abogados y médicos se van a procesar y contaremos con información actualizada sobre las agendas de cada uno de los usuarios, los documentos que se envían a la autoridad judicial y los que se reciben también a través del control de correspondencia».

Por otro lado, abundó, se encuentra la emisión de un manual interno de políticas y procedimientos donde se establecen los formatos que utilizarán.

«Este manual fue creado directamente por el equipo de trabajo que conformamos y que también va a facilitar mucho la organización de nuestro quehacer cotidiano y en la prestación de servicios».

CECOFAM, EL ROSTRO HUMANO Y SENSIBLE.

Navarrete Mendoza puso énfasis que en los últimos meses se han instrumentado, a través del trabajo del área social del club «Tecolín», talleres de trabajo y terapia ocupacional, «donde los padres e hijos interactúan, sobre todo los fines de semana, que son días propicios para la convivencia y eso facilita mucho la interacción padre e hijo.

El niño empieza a tener mayor disposición a convivir con su padre, que si bien es cierto no cuentan con la guardia custodia, nosotros hacemos estas actividades con la finalidad de lograr este acercamiento que a través de los juzgados que imparten justicia desde el ámbito legal y que al mismo tiempo el CECOFAM, con un rostro humano, también apoya de manera integral al desarrollo de las familias de Guerrero; esta visión, esta labor tan bonita y loable que el Centro de Convivencia Familia desarrolla día con día».

Resaltó que resulta admirable cómo funcionarios de esta institución «y empezando desde quien está presidiendo» cuenta con una alta sensibilidad y preocupación porque a las familias se les brinde un servicio integral «donde no nada más se les dé seguimiento legal a sus asuntos, porque no hay que perder de vista los sentimientos, las emociones que se involucran dentro de una controversia familiar.

Sabemos que la crisis del divorcio siempre será una situación de alto impacto para las familias, que si no se maneja adecuadamente puede dejar secuelas a largo plazo y donde justamente esta visión de nuestras autoridades no nada más es darle seguimiento objetivo y judicial, sino también resarcir propiamente la dinámica familiar y una vez que termine el asunto legal pues sigan interactuando».

Navarrete Mendoza mencionó que más allá del procedimiento los padres siempre serán los padres «y aunque estén separados tiene que haber convivencia con ellos.

Sabemos que si la familia es estable también los hijos van a tener mayores condiciones de lograr un desarrollo óptimo, pero si también el núcleo familiar esta desquebrajado, va a posibilitar que sean presa fácil de organismos de la delincuencia organizada o de otro tipo de fenómenos sociales que van en decremento del desarrollo humano», finalizó.