COLUMNA

Enfoque

Carlos Díaz Figueroa

Centrado debate de Héctor Astudillo

El pasado jueves en la tribuna del pleno del Congreso del Estado, el Diputado priísta Héctor Antonio Astudillo Flores dejó claro de que está hecho para debatir y defender los derechos de la fracción priista y de la propia 60 Legislatura Local.

Aun cuando en lo personal he tenido algunas diferencias con el diputado, debo reconocer que es una figura con un caminar en el alto grado de capacidad y experiencia para debatir de cara a la rectitud en el proceso legislativo.

Un legislador al igual que sus homólogos de la bancada priista con amplia tenacidad para argumentar en defensa y en congruencia a los derechos e interés de la Ley Orgánica de ese poder de estado.

El debate congruente de Héctor Antonio Astudillo Flores está sustentado en la legalidad para el equilibrio del congreso local, no se puede surgir en la continuidad de un mandato en la Mesa directiva a caprichos y compromisos políticos.

Sin entrar a las descalificaciones, sino con una mirada al cambio, el también presidente de la Comisión Especial del Bicentenario, argumentó en razón y a medida de la armonía que merece tal soberanía.

En el Congreso del Estado debe haber sin duda un equilibrio fundamental, es decir, con la equidad y un presidente del PRI en los trabajos del pleno para salvaguardar conjuntamente con todos los que conforman esa legislatura.

En una visión a las formas y tiempos, Astudillo Flores intentar motivar y proponer el cambio de la Mesa Directica con una inédita integración de diputados las fracciones parlamentarias y representaciones de partidos.

La modificación y de acuerdo a lo establecido por la Ley Orgánica del Poder Legislativos, el diputado priista defendió trascendentalmente la ponderación para los trabajos del segundo periodo ordinario de sesiones.

Por lo que la demostración fue también basada en los signos constitucionales para consolidar el avance democrático del congreso local y al mismo tiempo persuadir en una moderación de armonía 

La discusión lógica en Héctor Astudillo no es más que la formalidad y el amplio criterito para rectificar la política interna y externa de frente a la verticalidad a las causas más sentidas de la entidad.

En una conversión en la que nadie esté por encima de la ley, sino, mediante un paradigma en el que radique la cordura para lograr consensos y de esa manera privilegiar los acuerdos a través del diálogo.

De ahí, podemos reconocer, la civilidad, madurez y sensibilidad de una larga experiencia del Diputado Local del PRI en un potencial en el código de las ideas y razonamientos para elevar el debate legislativo.

La perspectiva de cambio de Beatriz Mojica

No cabe duda que entre las virtudes del gabinete estatal del gobernador perredista Angel Heladio Aguirre Rivero, es el recurso humano y moral en la dirección de la titular en la secretaría de Desarrollo Social.

Beatriz Mojica Morga es una funcionaria sin duda con oficio al servicio público, elevando las acciones y los programas de tal secretaria con amplió sentido para los que menos tienen en Guerrero.

Prueba de ello, fue la gestión de los convenios que se firmaron en la reciente visita en Apango por el presidente Enrique Peña Nieto para impulsar el crecimiento  económico para la generación de empleos.

Además, del fortalecimiento del tejido social. La funcionaria del gobierno estatal fue buscar la inversión de más 250 millones de pesos para la electrificación de comunidades con lato índice de marginación.

A fin de lograr una calidad de vida para aquellos guerrerenses que carecen de ese servicio y otras oportunidades en el desarrollo social, como parte de la Estrategia Nacional de la Cruzada Contra el Hambre.

Por lo que ha personificado un avance e impacto en las acciones y obras en la congruencia a la indigencia, el hambre, desempleo y otros efectos sociales en la visión de cambio de Beatriz Mojica.