PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Cobardía de Aguirre por

matar a Raymundo:HGE  

Tino Gatica/Colaboración especial.--El gobernador (Ángel Heladio Aguirre Rivero) “es una persona cobarde porque si no quería ayudarle a resolver problemas y no tenía dinero para depositarlos le hubiera dicho que no tenía; (además) no creo que la cabeza de Raymundo Velázquez Flores valiera dos millones de pesos”,  para haberlo mandado asesinar, así habla Hortencia Gallardo  Espinoza, visiblemente dolida y apesadumbrada por el asesinato del líder social, que causó más conmoción y miedo en la entidad.

También, advirtió que emprenderá una campaña para exigir justicia  que se le haga justicia, pues ahora “ya no tengo miedo y si me van a matar que me maten” insistiendo en que puede creer que la vida de su esposo costara dos millones de pesos”.

Y si me va a matar, lo responsabilizo a él, pero que lo haga de frente para que yo ya deje de estar chingando,  estoy dispuesta a todo, “porque a mí ya ahora me da lo mismo”.

Como se recordará el cuerpo del dirigente de la Liga Agraria Revolucionaria del Sur “Emiliano Zapata”, fue encontrado abandonado el lunes 5 de agosto en el municipio de Coyuca de Benítez, aunque diversos medios informativos incluso lo dieron a conocer días después, aunque la conmoción estaba generalizada, (el chofer que lo acompañaba y sobrino posteriormente fue encontrado muerto).

Después de que un contingente de unas 50 personas marchó hacia el Palacio de Gobierno, y que en ese sitio, en las escalinatas, varios de sus integrantes comenzaron a golpear con palos las puertas de acero gritaron: “Aguirre asesino, que matas campesinos”; “justicia para Raymundo”.

En esa manifestación de repudio sobre el asesinato de Velazquez Flores se encontraba su ahora viuda, Hortencia Gallardo Espinoza, quien visiblemente alterada por ese duelo se expresaba fuerte. Ella responsabilizó directamente de ese asesinato al gobernador de la entidad, Ángel Heladio Aguirre Rivero, debido a que el ahora victimado le había dicho que lo querían matar y que sospechaba que era por los 2 millones de pesos que gestionó y que estaba por liberarle el gobierno del estado.

Durante la protesta realizada en la puerta del Palacio de Gobierno fueron colocadas mantas donde se leía: “Necesitamos una cruzada a favor del hambre, pero de justicia”, “El estado los mató por buscar cambios productivos”.

La viuda expuso que de dos años a la fecha la familia de Velásquez Flores fue víctima de una persecución política por lo que se tuvieron que desplazarse de su lugar de origen. Y advirtió:

Emprenderé una lucha por el esclarecimiento del crimen de mi marido, calificando de “cobarde” a Ángel Aguirre y “si me va a mandar a matar, pues que lo haga”.

Denunció que ninguna autoridad de gobierno se ha comunicado con la familia del finado para respaldarlos o apoyarlos luego del doble crimen, en donde dijo tener sospechas de que la orden de asesinar a Raymundo Velázquez Flores salió del gobierno que encabeza Aguirre Rivero.

Mencionó que hace un mes aproximadamente Raymundo Velázquez sostuvo un encuentro con el gobernador donde le autorizaron 10 millones de pesos para proyectos productivos y otros 10 para la adquisición de láminas galvanizadas, mismas que entregarían a familias de diversos pueblos.

“Lo andaban cargando vuelta y vuelta y le decían que ya le iban a dar la factura pero no se la daban, pero apenas Raymundo me mostró una factura donde decía que ya estaban autorizados los dos millones de pesos y tenía que venir el lunes 5 de Agosto a Chilpancingo para firmar y que se le hiciera el depósito a la casa materialista donde se compró el material”, recordó.

En ese momento expuso: “yo siento y estoy casi segura que fue el gobierno el que no quiso depositar los dos millones de pesos porque hoy mismo pasé a la casa materialista y me dijeron que recibieron una llamada del gobierno donde les comunicaron que el deposito se cancelaba porque ya no estaba Raymundo Velásquez Flores, con quien se había hecho el trato”.

Afirmó que Velásquez Flores le dijo que no sabía quiénes eran las personas que lo perseguían, pero que estaba seguro de que todo provenía desde el gobierno del estado porque el gobernador ya le había avalado la entrega de dos millones de pesos.

“Yo estoy segura que fueron gentes de gobierno”, resaltó la mujer que segundos antes había llorado al recibir las condolencias de todos los compañeros de la organización a la que pertenece.

En esa concentración, en donde advirtieron que intensificarán su forma de protesta si no les dan una respuesta sobre su exigencia, también los acompañaron representantes de otras organizaciones como Organización Popular de Productores de la Costa Grande (OPPCG), del Partido Comunista de México (PCM), de la Universidad de los Pueblos del Sur (UNISUR) y del Frente de Izquierda Revolucionaria (FIR), quienes repudiaron el homicidio y exigieron justicia para los familiares de las víctimas.