COLUMNA

Resquicio

Hipólito Marbán

HOTELEROS DE ACAPULCO

 LIMOSNEAN TURISMO

 Para los que tuvimos la experiencia de pasar el puente patrio en el puerto de Acapulco, sobre todos los visitantes que varamos desde el 14 hasta el 20 de septiembre, vivimos el acoso de hoteleros que como buitres, pedían que se pagará el hospedaje como temporada alta, a sabiendas de la contingencia que se vivía hace exactamente un mes, turistas y visitantes abarrotaron las inútiles oficinas de turismo tanto del Municipio,

como del estado, que nada podían hacer, pues, aunque existía la palabra empeñada del presidente de la República Enrique Peña Nieto y del Gobernador Guerrerense Ángel H. Aguirre Rivero, de que no se cobrará cuatro noches, hasta en tanto de habilitará la autopista del sol en su tramo trecientos (agua de obispo), los hoteleros que integran Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas Acapulco (AHETA) encabezados por MARY BERTA MEDINA CORTES, lejos de sumarse al clamor gubernamental, hicieron caso omiso y apenas a regañadientes si “regalaron” una noche, no es que los turistas no quisieran pagar y seguir derramando dinero a favor del puerto, pues desde el martes 17 como cada año, al puerto en materia turística no se le considera como temporada alta, los integrantes de la AHETA, como viles buitres, se aprovecharon de la situación e hicieron su agosto, insensibles con los turistas, en las hospederías que “dieron” una noche, se les quito el agua, hoy prestos y contentos si cobraron puntualmente el pago por parte del gobierno, la AHETA lidereado por MARY BERTA MEDINA CORTES demostró su amor al próximo, como viles buitres, sacaron la poca sangre de los turistas varados, pues los cajeros carecían de dinero. Hoy como viles limosneros piden que el gobierno impulse la imagen del puerto, que como viles carroñeros esperan que otra contingencia ocasionada por los huracanes Manuel e  Ingrid, y se llenen los bolsillos a costa de la desgracia ajena, Acapulco se encuentra aún más endeble, el mar sigue sacando lo que le llevaron los ríos, la insalubridad de comida en las playas, es por el momento no apropiado visitarlo, la autopista del sol lenta, con tramos inseguros y laderas aun escurriendo, Acapulco necesita estar de pie, pero con empresarios y gobierno, comprometidos con los visitantes, que se les vea como tal y no como presas, porque el Acapulco actual, no es como lo quieren disfrazar las televisoras, falta ver el caos de que se vive en la Avenida Cuauhtémoc, y no se diga el calvario de cruzar por las cruces, calles llenas de baches e inundadas por los trabajos del acabus.. veremos