martes, 19 de noviembre de 2013

POLICRONICA

    Pelele…Aparte de llorón, es un pelele el presidente municipal de Acapulco, por ello lo “brincan” para designar a su jefe policiaco, pero él mismo lo propició al estar pidiendo dinero a cada rato al gobierno estatal como empleado para que lo ayuden a resolver los problemas.


Desde que tomó posesión como presidente municipal de Acapulco, Luis Walton Aburto, se ha quejado de todo, principalmente que no le alcanza el dinero para resolver los conflictos que le explotan en sus manos, pues es un pésimo administrador de la hacienda municipal. El ex dirigente nacional del Partido Movimiento Ciudadano (PMC), desde el momento en que se convirtió en presidente municipal de la perla del Pacífico, se convirtió simultáneamente en un auténtico pelele. Nos preguntarán nuestros lectores, porque lo calificamos de pelele, y para su aclaración, pues de acuerdo al diccionario tiene tres significados Pelele:1.-Muñeco de figura humana hecho de paja o de trozos viejos de tela, que se saca a la calle en Carnaval para quemarlo o mantearlo. 2.-Persona débil o de poco carácter, que se deja manejar por los demás muy fácilmente.3.-Prenda hecha de punto, de una sola pieza, que se pone a los niños pequeños para dormir. Para el caso que nos ocupa, Luis Walton Aburto, se apega a la segunda explicación, porque es una persona débil o de poco carácter, que se deja manejar por los demás muy fácilmente. Esto quedó evidenciado en el momento de que comienza a llorar con el gobernador perredista Angel Heladio Aguirre Rivero de que no tiene dinero para pagar salarios, quincenas, prestaciones e indemnizar a policías que no fueron certificados al no pasar los exámenes de confianza, además lloraba de que su antecesor priísta Manuel Añorve Baños, le saqueó las arcas por dos mil 160 millones de pesos, pese a su escándalo mediático, es la hora que los regresa, ni lo ha metido al bote porque goza de fuero constitucional el ex alcalde, ya que es diputado federal plurinominal en Congreso federal. Esto se confirma ahora con el nombramiento a sus espaldas “brincándolo”, que no lo consultaron y junto con su Cabildo del nuevo Secretario de Seguridad Pública municipal, Alfredo Álvarez Valenzuela, quien será el encargado de coordinar a los integrantes de la nueva policía de este destino turístico, en sustitución de Jesús Cortez Jiménez que también lo enviaron de la Policía Federal, pero lo grave que no fue tomado en cuenta el Cabildo aunque lo manden de donde sea. El nombramiento fue acordado a puerta cerrada entre Manuel Mondragón y Kalb, Comisionado de Seguridad Pública federal y Angel Heladio Aguirre Rivero, gobernador de Guerrero, y lo peor en el mismo puerto de Acapulco, recayendo esa responsabilidad en el comandante Alfredo Alvarez Valenzuela miembro de la legendaria cofradía policiaca denominada La Hermandad, quien además tiene en su contra denuncias por abuso de autoridad, fue el encargado del operativo Guerrero Seguro y participó en el desalojo violento de normalistas de Ayotzinapa, que dejó un saldo de tres muertos, dos estudiantes asesinados y un empleado de gasolinera falleció semanas después por las quemaduras producto de la explosión del 12 de diciembre de 2011, los hechos siguen impunes. La designación de Alvarez Valenzuela ocurre luego de que el comisionado nacional de Seguridad, Manuel Mondragón y Kalb, anunció “un golpe de timón” en materia de seguridad en el principal destino turístico de la entidad y complementado por el gobierno perredista que encabeza Angel Heladio Aguirre Rivero, a través de su vocero José Villanueva Manzanares, quien afirmó que la policía porteña se encuentra infiltrada por el narco. Por eso el gobierno estatal y el federal se “brincaron” a Walton Aburto, en la supuesta designación del comandante Alfredo Álvarez Valenzuela como nuevo jefe de las policías en el municipio, en sustitución de Jesús Cortés Jiménez, ambos de la Policía Federal. A todas luces Mondragón y Kalb en complicidad con Aguirre Rivero violentaron flagrantemente el artículo 115 Constitucional, en su parte medular textualmente dice: “Cada municipio será gobernado por un ayuntamiento de elección popular directa, integrado por un presidente municipal y el número de regidores y síndicos que la ley determine. La competencia que esta Constitución otorga al gobierno municipal se ejercerá por el ayuntamiento de manera exclusiva y no habrá autoridad intermedia alguna entre este y el gobierno del estado”. También la Constitución en el artículo 115, en su inciso “d”, especifica cuando puede intervenir el gobierno estatal en las funciones de un Ayuntamiento, pues “el procedimiento y condiciones para que el gobierno estatal asuma una función o servicio municipal cuando, al no existir el convenio correspondiente, la legislatura estatal considere que el municipio de que se trate este imposibilitado para ejercerlos o prestarlos; en este caso, será necesaria solicitud previa del ayuntamiento respectivo, aprobada por cuando menos las dos terceras partes de sus integrantes”. En el caso de la seguridad, en su inciso “h”, indica que en cada municipio la responsabilidad de atender este rubro son los Ayuntamientos y lo explica. “seguridad pública, en los términos del artículo 21 de esta Constitución, policía preventiva municipal y transito”. Para reafirmar la violación a lo descarado al Municipio Libre y Soberano de Guerrero, el mismo gobierno de Guerrero emitió un comunicado de prensa donde informó que en una reunión la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) y el gobierno de Guerrero, presentaron al nuevo secretario de Seguridad Pública municipal, Alfredo Álvarez Valenzuela, quien será el encargado de coordinar a los integrantes de la nueva policía de este destino turístico, y de instrumentar estrictos mecanismos de control y supervisión, bajo la línea Cero Tolerancia a la Corrupción, establecida por el comisionado Nacional de Seguridad. Existe notoria imposición y crudo autoritarismo del gobierno federal y estatal al avasallar al Cabildo en su conjunto del Ayuntamiento de Acapulco, esto más allá de la inutilidad como presidente municipal Luis Walton Aburto que ha demostrado a más de un año de gestión fallida, y que no ha dado muestra de capacidad de liderazgo en política de un importante municipio, si lo “brincaron”, queda comprobado que es un auténtico pelele de Aguirre Rivero y para consolarlo, el mismo gobernador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Angel Heladio Aguirre Rivero ya le entregó recursos por el orden de los 216 millones de pesos al presidente municipal de Acapulco, Luis Walton Aburto, de los cuales, 96 millones fueron gestionados por el propio alcalde ante la federación correspondientes al ramo 33, y los otros 120 millones son aportación del gobierno estatal para destinarlos a diversos apoyos del ayuntamiento. En tanto el resto de los miembros del Cabildo sencillamente están callados, no les importa que les hayan “violado”, su autonomía por el gobierno federal y estatal, porque también se conforman con recibir dádivas para estar mudos y dejar al pueblo de Acapulco que lo mancillen como sea. Este caso debiera ser un ejemplo para que el resto de los 80 municipios que conforman el estado de Guerrero no se vuelva a repetir, por lo menos de manera burda la intromisión de dos niveles de gobierno al municipal. Ahora con el gobierno de la república que regresa a la presidencia el partido Revolucionario institucional (PRI), está recobrando el autoritarismo sin respetar la Constitución y eso es dañino para lo que se pregona del respeto de los tres niveles de gobierno y perjudicial para el discurso de la democracia. Ojalá sea el único caso y en el futuro no se repita otra imposición vertical, principalmente en materia de seguridad que es un rubro endeble ante la creciente ola de inseguridad en Guerrero y en todo el país.

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