PRIMERA PLANA

Contra voluntad de damnificados

ya está la demolición en la capital

Javier Francisco Reyes.--Aunque haya inconformidad de las familias damnificadas hace seis meses y sin tener la información que les van a construir sus nuevas viviendas en la reubicación, tras las afectaciones del huracán “Ingrid” y la tormenta “Manuel” del mes de septiembre, en Chilpancingo, las autoridades iniciaron la demolición de viviendas colapsadas.

Además los damnificados que a las pocas semanas de que pasó lo fuerte de la contingencia regresaron a sus casas, denunciaron que el gobierno sigue sin restablecer al cien por ciento los servicios públicos. 

“Tuvimos que regresar porque no tenemos dónde irnos a vivir”, señala la señora Rosa Nava quien tiene su casa en la calle Mier Terán, en la colonia “Morelos”, en la avenida “Alejandro Cervantes Delgado”, a más de ocho metros del Río Huacapa.

Dice que a más de cinco meses, el drenaje no funciona adecuadamente estas casas que están en la franja de la avenida que quedó colapsada por las aguas.

La mujer señala la vivienda de enfrente que está siendo demolida por una empresa contratada por las autoridades del municipio.

“En esa casa que la tumbó el río, vivía una señora a la que se la conoce como doña Chana quien apenas tenía unos meses de haber comprado esta vivienda”, refirió.

Doña Rosa Nava, cuenta que las familias de esta parte de la ciudad, tienen que vivir con los fuertes olores de las aguas del drenaje que corre por el Huacapa.

Y es que los colectores marginales que servían para recoger las aguas del drenaje pluvial y sanitario, quedaron destrozados por las aguas provocadas por “Manuel”.

Esta estructura hidráulica que fue construida durante el gobierno de Zeferino Torreblanca Galindo, forma parte del proyecto de la planta tratadora de aguas residuales que se encuentra ubicada en la comunidad de Petaquillas.

Son más de 450 litros por segundo de descargas de aguas negras que desembocan a lo largo del Huacapa y que desde hace más de cinco meses, después de las lluvias, no reciben ningún tratamiento.

“Los que vivimos aquí tenemos que sufrir los fuertes olores y eso ha provocado que mi nieto se enferme a cada rato”, aseveró doña Rosa Nava.

La mujer pidió a las autoridades que agilicen los trabajos de reconstrucción del encauzamiento del Río Huacapa.

Dice que de su vivienda solo una recámara se inundó, pero que las autoridades de Protección Civil le han dicho que está en buenas condiciones y que no será necesario derribarla.

“Lo que queremos es que esto vuelva a la normalidad porque ya pronto habrá lluvias y si el gobierno no realiza la reconstrucción esto se pondrá peor”, dice la señora.

Las autoridades del ayuntamiento de Chilpancingo, informaron que ya se demolieron ocho casas colapsadas y que cuyos cascarones invadían los trabajos del encauzamiento del Huacapa.

A lo largo de las márgenes de esta afluente, se van a demoler un total de 15 viviendas.

Según la autoridad, las viviendas que serán demolidas son de familias que van a ser reubicadas en un terreno que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano(Sedatu) va adquirir en las próximas semanas.

Por su parte, Gumaro Guerrero Gómez, presidente de la Coordinadora de Colonias y Comunidades Afectadas por el Río Huacapa, señaló que hay quejas de las familias de que el gobierno sigue sin decirles a que lugar las va a reubicar.

“Es cierto que a lo mejor algunas de ellas vivían en una zona federal, pero las autoridades deben de ser sensibles y resolverles su problema de vivienda”, manifestó.

A más de cinco meses de las lluvias por “Manuel”, por lo menos cien familias siguen viviendo en un albergue que instaló el gobierno.

El dirigente de esta agrupación que aglutina a 20 colonias ubicadas casi a las orillas del Huacapa, no descartó que la gente reinicie una serie de movilizaciones para exigir al gobierno que les diga a que lugar se van ir a vivir.

“No es posible que la gente regrese al lugar donde vivían, ya que implica más riesgos”, aseveró.