Desaparecieron hasta 7 de
sus colegas policías de Iguala
Jonathan Cuevas.IGUALA DE LA INDEPENDENCIA, GRO.--Familiares de víctimas de desaparición forzada en esta ciudad, se niegan a que regrese la Policía Preventiva Municipal que, de acuerdo a autoridades municipales entrarían en operaciones a partir de este mes de diciembre. Los propios elementos de esta corporación ligados al grupo criminal “Guerreros Unidos”, habrían desaparecido incluso a al menos 7 de sus compañeros, entre ellos el ex director Abraham Alemán García.
Varias de las familias que rompieron el miedo para organizarse y buscar a sus familiares desaparecidos (en algunos casos desde el año 2008), han advertido que elementos de dicha corporación fueron los que “levantaron” a sus familiares o, intervinieron de alguna forma en la desaparición.
Durante el fin de semana, las cerca de 300 personas que se han organizado para buscar a sus familiares y que creen que varios de éstos pudieran estar enterrados en fosas clandestinas cerca de Cerro Gordo, prepararon un documento dirigido al presidente municipal Silviano Mendiola Pérez, para invitarlo a una reunión mañana martes en la Iglesia de San Gerardo, a las once de la mañana.
Respaldados por la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Ciencia Forense Ciudadana (CFC) y el párroco de la Iglesia de San Gerardo, solicitaron una audiencia con el recién nombrado alcalde que, reprocharon, ni si quiera ha tenido la cortesía de presentarse y buscar el diálogo con el movimiento que cada vez es más grande.
En la invitación se expone que habrán de plantearle asuntos relevantes y urgentes que interesan a los familiares de los desaparecidos en esta ciudad. Exigen a través del escrito que no sean violentadas sus garantías constitucionales y derechos humanos.
La intención es exigirle al alcalde que no se reinstale a los policías municipales que han ido a capacitarse a Tlaxcala, al considerar que varios de los elementos que estuvieron trabajando para grupos del crimen organizado, continúan libres y regresarán a sus actividades como policías mejor preparados, lo que daría pie a que cometan más ilícitos.
En una reunión previa llevada a cabo en la Iglesia de San Gerardo, los familiares de las víctimas mostraron su desconfianza a la corporación municipal y dijeron temer ante el regreso de los preventivos.
“Si ellos regresan estamos muertos, nos van a asesinar uno por uno a los que integramos este movimiento”, sentenció un hombre que busca a su hijo y según dijo; “se lo llevaron policías municipales el día que desapareció”.
Otra mujer indicó que a su hijo también lo desaparecieron desde hace un año los policías municipales. Pero no son los únicos casos pues de acuerdo a los coordinadores del movimiento, hay decenas de casos entre los 300 que tienen documentados, donde la policía municipal participó de forma directa o indirecta en la desaparición de sus familiares.
Advirtieron que las propias autoridades municipales han informado que durante la segunda semana de este mes, los policías municipales que fueron enviados a cursos en Tlaxcala serán reincorporados a sus actividades de prevención del delito en Iguala.
Esto provocó la inconformidad e incluso el temor de las familias organizadas que buscan vivos o muertos a sus familiares.
En el encuentro estuvieron presentes representantes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y la Procuraduría General de la República (PGR), a quienes les solicitaron ya medidas cautelares para las familias que buscan a sus desaparecidos, así como la intervención del gobierno federal para que no regresen los agentes municipales.
Policías desaparecidos…
Dentro de la policía municipal se cometieron infinidad de delitos desde el gobierno del pirísta Raúl Tovar Tavera y que se agravaron con la llegada del perredista José Luis Abarca Velázquez.
De acuerdo a testimonios recabados en esta ciudad; la mayoría de los elementos que integraban la corporación municipal estaban ligados al grupo de los Guerreros Unidos.
Los policías conocidos como “bélicos”, es decir, aquellos que se encargaban de los rondines nocturnos y las operaciones especiales, que siempre iban cubiertos con capuchas; eran los principales operadores del crimen organizado.
Pero aquellos que operaban en los retenes de acceso a la ciudad sobre las vías que vienen de Chilpancingo, Taxco y Cocula, eran quienes llevaban presas a las víctimas y, posteriormente desde la comandancia municipal eran sacadas para entregarlas a los sicarios.
Por su parte los “bélicos” manejaban patrullas apócrifas que a través de redes sociales y de forma anónima, los ciudadanos denunciaron públicamente en varias ocasiones. El gobierno del estado y federal siempre se negaron a investigar estas acciones ante la falta de “una denuncia formal”.
Desde esas unidades e incluso con varias oficiales, los uniformados cometían “levantones” de personas durante el día y la noche. De los retenes policiacos de acceso a la ciudad fueron levantadas cientos de personas, según se cree.
Durante el gobierno de José Luis Abarca fueron desaparecidos incluso al menos 7 elementos de la Policía Municipal que se atrevieron a hacer frente a los policías ligados al narco, al advertirles que los denunciarían ante la PGR o en Derechos Humanos.
Y es que los operadores de “Guerreros Unidos” dentro de la corporación maltrataban y torturaban al resto de sus compañeros que no coincidían con su forma de pensar y actuar.
“Varios de los policías fueron desaparecidos por sus propios compañeros, dentro de la comandancia los torturaban y luego se los llevaban para desaparecerlos. Algunos decían que los habían quemado vivos”; dijo un ciudadano al emitir su testimonio a este medio informativo.
Entre éstos casos estuvo el de Abraham Alemán García quien fue durante el gobierno de Raúl Tovar Tavera, director de la Policía Municipal.
De este caso se sabe que un detenido por el caso Ayotzinapa de nombre Ramiro Ocampo Pineda, señaló una de las fosas ubicadas en el paraje de La Laguna como el punto donde habría sido sepultado el comandante Abraham.
El domingo 22 de noviembre, familiares de los desaparecidos en Iguala e integrantes de la UPOEG, localizaron y excavaron alrededor de 7 fosas clandestinas en el paraje la Laguna y la Joya, donde localizaron huesos y un pedazo de cráneo humanos.
Ante ello, el lunes 23 del mes en curso, peritos en criminalística empezaron con los trabajos de exhumación de osamentas en el Paraje la Laguna y la Joya, donde fueron localizadas 16 osamentas del sexo masculino y femenino.
De acuerdo al testimonio de uno de los detenidos a quien llevaron al lugar de las fosas ubicadas en el paraje la Laguna, ahí solían sepultar los restos de las víctimas de los Guerreros Unidos. En ese lugar, el detenido Ramiro Ocampo Pineda reveló que era jefe de halcones y que cuando trabajó como caporal con otros miembros del grupo criminal, le mostraron donde habían enterrado al ex director de la policía preventiva Abraham Alemán García.
En su relató, Ocampo Pineda dijo que cuanto los integrantes de GU hacían fiesta, las realizaban en el Rancho “Los Naranjos”, lugar donde presuntamente hay una fosa clandestina a la cual van a tirar los cuerpos de sus víctimas y que, en ese lugar hay una presa donde el ganado bebe agua.
Los elementos de la PGR llevaron a Ramiro Ocampo hasta el paraje la Laguna, donde les señaló la fosa donde enterraron al ex director de la policía preventiva y a sus colaboradores.
En su declaración ante el Juzgado Federal de Procesos Penales con sede en Tamaulipas, Ramiro Ocampo aceptó haber trabajado para el Grupo “Guerreros Unidos”, aunque negó haber participado en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas, el pasado 26 y 27 de septiembre. (API).
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