COLUMNA

Resquicio

Hipólito Marbán

RODRÍGUEZ MARTÍNEZ: VIOLA

 LIBRE TRANSITO A OMETEPENSES

 Haciendo gala de impunidad y violando el libre tránsito el aspirante priista la alcaldía de Ometepec, región de la Costa Chica, tierra de la familia Aguirre Rivero, el domingo quince celebró su cumpleaños en el rancho “Don Chema” lugar al que llegaron personas muy allegadas al festejado Juventino Rodríguez Martínez, mejor conocido como “Tino” quien entre los comensales invitados

se corre el rumor de que Tino Rodríguez, ya es el palomeado para ser el abanderado del tricolor en Ometepec, Guerrero, aunque Tino aseguró que la fiesta era para todos sus amigos de diferentes partidos,  presumió tener adhesiones de todos los colores, lo cierto que en la comilona solo se vieron priistas y no perredistas, en el rancho “Don Chema” corrió el tequila, mezcal, whisky, y la barbacoa de res, pues más que una festividad, parecía una celebración anticipada de Tino Rodríguez como alcalde de Ometepec, sin serlo aún,  pues es sobrada la cercanía que ha tenido Tino con su hermano Vicente Rodríguez Martínez, magistrado presidente de la primera sala penal del Poder Judicial de Guerrero, y fuerte aspirante a dirigir dicho poder en caso de que el priísta Héctor Antonio Astudillo Flores, llegase a la gubernatura con el voto de los guerrerenses y costa chiquenses. Tino Rodríguez sin carrera de partido ha crecido bajo el amparo y cobijo de su hermano el magistrado, sintiéndose presidente municipal ometepense, se apropió de la carretera que comenzó la cabalgata desde el crucero de El Pitayo pasando por la carretera Acapulco- colonia Miguel Alemán, hasta el rancho de su propiedad denominado “Don Chema”, mismo que generó molestia entre los automovilistas que ante la impotencia de manifestarse mejor se concretaron a mirar el contingente de caballos que acompañaba lentamente a Juventino Rodríguez Martínez, lo curioso no es que Tino celebre su cumpleaños año con año e invitar a la gente que le acomode ni hacer la comida que más le guste, lo que llama la atención, es que aun sin ser candidato ni alcalde de Ometepec, ya hace gala de soberbia, prepotencia y en caso de ser edil de los ometepenses, la pela de gallos será una constante así en ese municipio, como las futuras apuestas en carrera de caballos, por lo que auguramos en caso de que Tino lo favorezca el voto de Ometepec, las apuestas serán constantes y donde existen apuestas existe inseguridad, el abogado Tino Rodríguez, en la capital de Guerrero se ha caracterizado por realizar trámites  por Ministerio de Ley en su oficina pues es allí donde manejan el libro del distrito judicial de Abasolo, los fines de semana la oficina se atiborra de firmantes que van a realizar una transacción legal, solo el juez de Abasolo nada más estampa su firma como Notario por ministerio de ley, es común que personas de escasos recursos económicos acudan a la oficina de Tino Rodríguez a tramitar escrituras pues cobra un poco menos que las notarías uno y dos de Chilpancingo y piden menos requisitos, que es allí donde está su fuerte de Rodríguez Martínez, y lo malo sin que ningún notario capitalino se pronuncie en contra de aquellos jueces que realizan todo tipo de escrituras, como poderes notariales, ratificación de firmas, convenios y todo por ministerio de ley, ya que la ley actual así lo concede, no descartamos que su hermano Vicente  se convierta en Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Guerrero, Tino Rodríguez después de ser alcalde, obtenga una patente de notario público por el ejecutivo en el distrito judicial de Abasolo, todo guerrerense tiene el derecho legal de votar y ser votado, pero el Estado no está para hacer bollos, se necesita humildad y no soberbia para gobernar los destinos de los ometepenses, se necesita un gobernante que detone el desarrollo social, que se vea a los gobernados como lo que son para servirles y no para servirse de ellos y de las arcas, Tino Rodríguez Martínez, seguramente tendrá las tablas que dice tener para gobernar el municipio de los Aguirre Rivero, pero deberá recordar que la ciudadanía no es la misma de hace diez o quince años, que primero está el interese superior del pueblo y después las mezquindades y los insultantes festejos en un municipio aun marginado por quienes lo han gobernado… veremos.