viernes, 10 de abril de 2015

ARTICULO

El Turismo Popular


César González Guerrero
Envío saludos cordiales a nuestros paisanos de la Costa Chica que, con gran esfuerzo, promueven la actividad turística, esperando continúen fortaleciendo este servicio en beneficio de sus comunidades.
La actividad turística, a nivel mundial, se ha desarrollado por etapas, prácticamente se inicia a mediados del siglo XlX, aproximadamente entre 1945-1958, como un turismo incipiente o elitista, en el siglo XX, entre 1959-1969, como turismo de transición y, a la fecha, después de 1969, como un turismo de desarrollo masivo.

La actividad turística comprende una serie de elementos, entre los cuales mencionamos los siguientes: la superestructura que se refiere a las instituciones que norman y regulan esta actividad; la demanda que está constituida por aquellos individuos interesados en cubrir sus necesidades físicas y espirituales; los atractivos que son los motivadores y orientadores del flujo turístico; el  equipamiento e instalaciones que se refiere a los establecimientos especializados en la prestación de servicios turísticos de calidad; la infraestructura que comprende la existencia de los servicios públicos elementales para la atención al turista; y, por último,  la comunidad local que son aquellos individuos que ofrecen los servicios turísticos de manera profesional y especializada, y aquellos que se encargan de proveer la materia prima para la actividad turística.
A nivel mundial, la mayoría de los aproximadamente 200 países, distribuidos en los 5 continentes, incluido México, destacan por el gran número de visitantes que tienen al año y que, me consta porque he tenido la oportunidad de estar ahí, como España, Francia, Italia, Austria, Alemania, Japón, Singapur, Tailandia, China, India, Nepal, Camboya, entre otros. Desde luego, el turismo en esas y otras naciones, significa un elevado porcentaje de ingresos económicos y que impactan en su desarrollo económico.
En México, no nos quedamos atrás, también existen lugares muy privilegiados en las 32 entidades federativas, incluido el Distrito Federal, que nos permiten ser una potencia mundial en el tema que hoy comentamos. Los espacios naturales, y los destinos turísticos nacionales, han sido de los más visitados en los últimos 50 años, muchos de ellos lugares vírgenes que, sin duda, el Gobierno de la República deberá impulsar con mayor vigor, a efecto de convertir nuestro país, en uno de los primeros lugares en el mundo. 
De acuerdo con las estadísticas oficiales más reciente, en el año 2011, Guerrero aportó el 1.3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) a nivel nacional, ocupando el lugar 22 de la tabla nacional, sobresaliendo la Agricultura, el Comercio y el Turismo, como las principales actividades económicas en el estado de Guerrero, y es  esta última, la que genera un mayor porcentaje a la economía guerrerense que  significa más del 70 por ciento.
Se debe recordar que, normalmente, el turista pretende satisfacer sus necesidades elementales como el descanso, la diversión, la tranquilidad y el conocer y disfrutar de escenarios novedosos e interesantes. Todo a un bajo costo y una excelente comodidad. En tanto que, los prestadores de servicios turísticos, desean brindar un servicio de acuerdo a sus posibilidades y circunstancias. De tal manera que depende mucho de lo que se ofrece es como se puede valorar su oferta. En este sentido se encuentran polos de desarrollo de primer, segundo y hasta de tercer nivel. El costo beneficio por lo regular está en función de la calidad del servicio.
En esta ocasión, por lo que se refiere al servicio que se ofrece en Guerrero, principalmente en  la Costa Chica, se debe reconocer que nos falta mucho para alcanzar las expectativas que las temporadas turísticas generan. Empezando por que la gente de nuestra región, dedicada a esta actividad económica, a pesar de sus aproximadamente 35 años de experiencia, pensando que es en 1980, cuando algunos amigos inician a construir sus famosas palapas o cabañas, rústicas, carecen de los apoyos suficientes y necesarios para, a su vez, estén en condición de ofrecer un servicio a la altura en que lo exigen los turistas.
El turismo en la Costa Chica, y obviamente en Guerrero,  puede ser una alternativa para el combate al desempleo y a la pobreza, también puede ser una opción para atraer el gran turismo internacional, pero así, sin carreteras, sin servicios públicos básicos, sin higiene, sin control de precios, sin seguridad, y sin calidad, no se puede esperar mucho. Las autoridades y los prestadores de servicio deben hacer un mayor esfuerzo para ello, aun es tiempo. Ya veremos.

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