Gustavo Alarcón Herera, presidente de la Organización “Ignacio Manuel Altamirano” (IMA) ayer por la tarde se solidarizó con Daniel Castellanos Barba, párroco de la Iglesia de San Antonio de Padua quien lleva 13 años de servicio y ahora el obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa de Alvarez, Alejo Zavala Ramos, lo suspendió para oficiar misas a los feligreses, además le cuartó su libertad de expresión para no dar información a nadie sobre el conflicto. (Fotos: Domingo Francisco Reyes).
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