COLUMNA

 Cosmos

Héctor Contreras Organista

LA PLAZA CENTRAL DE CHILPANCINGO

Ya falta poco tiempo para que se cumpla el primer año de que la plaza central de Chilpancingo se encuentre llena de estorbos, lonas apestosas, trebejos, basura, mariguanos, ratas y ratones de todos tamaños y colores, “colas” enormes de cuenta-habientes de los bancos, carros quemados, estatuas dañadas y… uno que otro viejo buey.

Con el pretexto de “protestar” por la lamentable, triste, reprobable, desesperante, angustiosa y dolorosa pérdida de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa el año pasado en Iguala, asunto del que el gobierno ya no dice nada y dolor al que literalmente todo el mundo nos unimos para protestar y exigir su presentación con vida, un grupo de personas se apropiaron de la plaza central, pero no para molestar y presionar al gobierno a la devolución con vida de los 43, sino para partirle la madre a la convivencia ciudadana y familiar de los chilpancingueños.

¿Por qué joder a los ciudadanos, a las familias, a los niños, a minusválidos y ancianos  que tenemos como único lugar de esparcimiento en Chilpancingo la plaza central? ¡Plaza mal hecha, por cierto!

Si se trata de exigencia al gobierno del estado, ¿por qué no irse a la entrada del palacio de gobierno a instalar sus carpas y mostrar su rabia, su enojo, su coraje a ellos, a los del gobierno? ¿Por qué agredir a Chilpancingo?

Por esa contrariedad, la población, lejos de unirse a la protesta, rechazó la invasión de su plaza central de la que han evitado su uso y se han cancelado muchas actividades de la población.

De pronto surgió el grito de los protestantes: “Aguirre Rivero, ya vete de Guerrero”… Y Aguirre Rivero se fue ya de Guerrero, del gobierno. 

Llega Ortega, y… contra Ortega. Al rato llegaría Astudillo y… contra Astudillo… Y al rato llega otro, u otra, digamos que Suchi… ¡Y todos contra Suchi!… ¡Huérfanos, pero… Contra Suchi!

Es cuento de nunca acabar ¿Y los niños que van por las tardes a jugar su pelotita y a corretear como el viento sin destino al parque, ellos y su diversión no cuentan para los protestantes?

Con su “protesta”, supuestamente contra el gobierno en la plaza central, le hacen lo que el viento al benemérito… Pero sí han afectado y mucho por casi un año a los habitantes de Chilpancingo.

Este pueblo que rechazó a Zapata y no lo dejó entrar al saqueo a la ciudad; este pueblo que combatió al canalla de Raúl Caballero Aburto y con la muerte de veinte de sus hijos pagó su caída.

Este pueblo que soporta todo: Que no haya agua, que aumente la violencia, que no haya policía, que la ciudad esté destrozada y que durante un año la priven también de su plaza central.

Este pueblo, que lejos de encontrar soluciones ve aumentar sus problemas y sin guía ni autoridad.