miércoles, 24 de febrero de 2016

COLUMNA

Cosmos

Héctor Contreras Organista


 Así nació la Bandera de México
El historiador Cronista del Municipio de Iguala e ingeniero mecánico don Andrés López Velasco, dedicó gran parte de su vida a investigar el origen de la Bandera de México.. 
Nació el 16 de septiembre de 1933. Falleció, lamentablemente, el 29 de noviembre de 2014 en la ciudad de Iguala. Antes de sus funerales se le rindió un muy sentido homenaje frente al busto que se levanta en su honor.
Reproducimos a continuación la entrevista que le hicimos el día de la Bandera, el 24 de febrero de 1999, en Iguala, Guerrero:
-Andrés, ¿qué importancia tiene el día 24 de febrero para el pueblo de México y particularmente para el de Guerrero?

 “Hoy, 24 de febrero es un día muy importante para todo México. Yo creo que en todos los países del mundo no habría día más importante que celebrar la Consumación de la Independencia y la erección de su propia Bandera. Afortunadamente esos dos hechos sucedieron en esta ciudad un día 24 de febrero de 1821 y hoy lo estamos conmemorando”.
 Entrevistado en el Museo a la Bandera, minutos antes de iniciar la 
celebración oficial, y rodeado por algunos de sus paisanos que conocen su valiosa trayectoria como investigador, Andrés López Velasco comentó:
“Me he dedicado en cuerpo y alma, desde hace unos cincuenta años -Andrés contaba cuando hicimos la entrevista con setenta años de vida-, a estudiar el origen, el significado de la bandera, de su escudo y de los colores. Hemos hecho viajes a Roma y en el Códice Vaticano encontramos antecedentes que nos dan una idea muy clara del origen de nuestra bandera».
 Explicó que en nuestro país todavía existen algunas confusiones respecto a sus orígenes, «sin embargo, allá descubrimos que nuestro Lábaro Patrio fue concebido por nuestros ancestros miles de años antes de la Conquista».
 Refiere que la Peregrinación Azteca que salió de Aztlán buscando la tierra prometida que les había ofrecido Huitzilopochtli, al llegar a la misma, ya portaban una bandera verde, blanco y rojo, y el escudo ya era el águila sobre el nopal. Obviamente sin estar devorando la serpiente, como actualmente se acostumbra, y que tiene un choque tremendo con la realidad de los hechos.
  «Si vemos la página número uno del Códice Mendocino, encontraremos que ahí está en 1325, fundando Tenochtitlan, y de hecho, la nación mexicana, y está el águila sobre el nopal, sin culebra.
 Posteriormente, a través de varias generaciones se usó el águila sobre el nopal, sin culebra.
 Hidalgo, Morelos, Guerrero, el propio Iturbide, ya consumada la Independencia usaba el águila sobre el nopal sin culebra.
 Aparece después la culebra siendo devorada por el águila y se provoca una gran controversia porque nuestros ancestros adoraban tanto al águila como a la culebra.
 Los grandes Señores de aquella época, empezando por Quetzalcóatl, tiene nombre de culebra: Culebra Emplumada, Culebra que vuela. Izcoatl: Culebra de obsidiana Cuaucoatl, en fin. Si ellos no hubieran querido a la culebra y representara para ellos el mal, no hubieran usado nombres de culebra. Es como en la actualidad, la gente se pone el nombre de Jesús, pero no se pone diablo o Luzbel, ¿por qué? Porque creen en Jesús, en aquel tiempo creían en las culebras.
 La culebra en todas las civilizaciones representa la paciencia, la tenacidad, la fecundidad. El símbolo de los médicos es un matraz con dos víboras enredadas. Si fueran la muerte o la maldad no la usarían nuestros científicos y sobre todo en una profesión tan noble como es la medicina. En fin, muchas cosas hemos investigado».
-¿Por qué un nopal en la Bandera de México, si se le considera planta agresiva?
 “Si nos nace un nopal en el jardín, lo primero que hacemos es tirarlo porque se va a espinar el niño. Sin embargo, nopal en náhuatl se dice Tenoch y nopal con tunas, Tenochtli y significa en castellano Árbol de la Inmortalidad.
 Si cortamos la penca de un nopal y la tiramos a la azotea, donde no hay ni tierra ni agua, los dos elementos indispensables para que se desarrollen los vegetales, ahí va a crecer un nopal. Si cortamos media penca y la tiramos, de ahí nace un nopal.
 En la actualidad, hasta del núcleo de una célula crece un nopal, árbol de la inmortalidad. Por eso nuestros ancestros lo plasmaron en la Bandera de México, una cosa hermosa, grande, bien pensada que desgraciadamente nuestros pueblos desconocen. He escrito un libro, ‘El Génesis de un Pueblo y su Bandera’, donde explico todas estas cosas».
-De acuerdo a tus investigaciones, ¿a partir de qué idea o de dónde nace, en qué época la figura del águila devorando a la serpiente?
 “Cuitláhuac usó una bandera en la mal llamada ‘Batalla de la Noche Triste’ que yo llamaría ‘Batalla de la Alegría’ o ‘Batalla de la Victoria’, porque por primera vez las armas nacionales se cubrieron de gloria y portaba una bandera verde, blanco y rojo con una águila sobre un nopal y en el pico del águila traía una figura, pero una figura que era un jeroglífico que era el grito de guerra de los aztecas y que lo está exhalando el águila. Entonces, tiene cierta similitud con una culebra. Quizá de ahí haya nacido el error de los españoles que empezaron a fabricar banderas devorando el águila a la serpiente. Realmente deberían estar a la par el águila, la serpiente y el nopal que son símbolos de nuestros ancestros”.
-Sabemos que cuentas con la colección más importante de banderas de México, ¿puedes hablarnos de ello?
“En efecto, tengo una colección muy amplia, yo le llamo Museo Itinerante de la Bandera. No es la más importante obviamente. La Secretaría de Gobernación y muchas otras más se dedican también a esas cuestiones. La mía es muy amplia, son ochenta banderas. La primera la llamo El Quetzalpamitl o “Bandera de los Cuatro Soles”. Quetzalpamitl porque está hecha de pluma. Pamitl significa bandera, en náhuatl Quetzal: Pluma, Pájaro, Ave.
Esa bandera representa a los colores de los Cuatro Soles que tanto adoraban en su cosmogonía nuestros ancestros y los colores jeroglíficos de los Cuatro Soles eran verde, blanco, rojo y azul. Desde esa época ellos empezaron a utilizar esos colores para infinidad de cosas. Por ejemplo las cuatro estaciones del año. La primavera, el verde. Las lluvias, el azul; el Blanco el Invierno, los cuatro puntos cardinales, los cuatro elementos constitutivos del universo: agua, aire, fuego y tierra. En fin, representaban tantas cosas que de esa forma idearon su primera bandera con los colores verde, blanco y azul.
Nuestras banderas, a partir de 1821 usaban sólo tres colores: verde, blanco y rojo porque fundieron el blanco y el azul en uno sólo representando a la religión.
Sin embargo en la época de Lázaro Cárdenas, cuando se decretó oficialmente el Día de la Bandera, una comisión de igualtecos que fue a solicitárselo, y afortunadamente lo aprobó, se ordenó un estudio exhaustivo sobre la bandera y encontraron que faltaba el azul y lo colocaron abajo del nopal en la forma jeroglífica de una gota de agua y nuevamente están en nuestras banderas los cuatro colores significativos de nuestros ancestros, verde, blanco, rojo y azul».
-¿Consideras que nuestra bandera, en este momento ya no debe sufrir ningún cambio?
“No creo eso. La historia es dinámica, lo que hoy es verdad, mañana puede no serlo. La tierra era plana y mataron al primero que dijo que era esférica. Y en ese sentido hasta las concepciones históricas van sufriendo algunas transformaciones. Se habla por ejemplo de que nuestro himno es un canto guerrero. Lo queremos, nos gusta y no faltará en algún tiempo, cuando se resuelvan quizá todos los problemas bélicos, que se cambiarán algunos términos o el propio himno en otro sentido. Y eso no debe espantarnos. La historia es dinámica. La verdad es dinámica. Lo que hoy es verdad, posteriormente quizá no lo sea. De momento no se ocurre ningún cambio, pero no sabemos qué pueda ocurrir en el futuro. No tenemos derecho a opinar sobre nuestras próximas generaciones”.
-Para el mexicano niño, para el mexicano joven, para el mexicano adulto, ¿cuál debe ser el significado de nuestra Bandera Nacional?
“Nuestra bandera es el símbolo de paz, de guerra y de unidad de todos los mexicanos. Están implícita en ella todo el desarrollo de nuestra civilización, sería largo de explicar, pero en síntesis, es el símbolo de paz, de guerra y de unidad de todos los mexicanos”.
-Se ha informado, a lo largo de los años, que en México hay maestros que pertenecen a ciertas religiones que se niegan a hacer el saludo a la bandera, se niegan a cantar el Himno Nacional en las ceremonias cívicas, ¿cuál es tu opinión sobre este aspecto?
“Están violando la ley y es un delito. Existe una ley de uso y manejo de los símbolos patrios, está sancionada por nuestras instituciones y debe observarse en todos los aspectos. La gente debe saludarla con respeto, debe cuadrarse el militar, debe tocarse el Himno Nacional, etcétera. Las medidas, las proporciones, los colores, la forma del escudo, todo está perfectamente determinado en esa ley y debemos observarla, quien no la observe simplemente y sencillamente está violando la ley y se hace acreedor a la sanción correspondiente”.
-¿Qué significa para ti, como Cronista de la Ciudad de Iguala el hecho de que aquí haya nacido la Bandera de México?
 “En primer lugar, un orgullo, y en segundo lugar, una obligación que tenemos de difundir su significado, de difundir su respeto y hacerlo con el ejemplo, no nada más con la palabra”.
-Vino el Presidente Ernesto Zedillo a inaugurar la Bandera monumental y vemos muchas banderas monumentales a lo largo y a lo ancho de la geografía mexicana, ¿Cómo toma Iguala el interés presidencial?
 “Como un interés muy sano de difundir el nacionalismo, de hacer que no se pierdan los valores culturales que de alguna manera se están perdiendo en alguna proporción. Nos están llegando ideas exóticas de otros países que de alguna manera pueden mellar el nacionalismo. El uso más extensivo que se está haciendo de estas astas monumentales sin duda que acrecentará nuestro nacionalismo”.
 -¿Por qué Iguala fue la cuna de la Bandera Nacional, por qué fue el sastre Magdaleno Ocampo quien la elaborara?
“Las circunstancias obligan a esas cosas. Cuando muere José María Morelos, el Ejército Insurgente se divide. Los insurgentes moderados que encabezaba Guadalupe Victoria y los insurgentes radicales que encabezaba Vicente Guerrero en unión de Nicolás Bravo.
 Los moderados se van hacia el norte, se remontan, se pasan inclusive a Estados Unidos y hasta ahí termina su función. Los radicales mantienen la llama de la Independencia en las montañas del sur.
 Para lograr la pacificación que finalmente se logró entre Iturbide y Guerrero, obviamente tenía que ser en una región del sur, y qué mejor que en una región central del actual estado de Guerrero, porque en ese tiempo pertenecíamos al estado de México, y se dio casualmente en Iguala. Los igualtecos no hicimos en realidad ningún mérito para merecerlo pero lo tenemos y hay que corresponder a ello».
 -¿Qué mérito se le ha dado al hacedor de nuestra Bandera?
“Es también una situación fortuita y casual. El era un sastre, era un barbero a la vez, rasuraba diariamente a Iturbide. Cuando hubo necesidad de hacer la bandera lo conocía porque inclusive eran paisanos. Magdaleno Ocampo fue de origen michoacano, aunque de muy chico llegó a Iguala, y al saber que había un sastre, simple y sencillamente solicitó sus servicios. Cobró 25 pesetas por el mismo y le tocó la fortuna de inmortalizarse como el sastre que hilvanó los sagrados lienzos de nuestra bandera por primera vez”.
 -¿Cuándo falleció don Magdaleno Ocampo y dónde está sepultado?
“Se ignora mucho de ello. Los personajes se vuelven históricos con el tiempo y de momento no lo son. No tenemos mayores datos más de que era de origen michoacano, vivía en la casa contigua a este recinto (calle Madero de la ciudad de Iguala) y desgraciadamente esa casa donde quedó su máquina en la que él hilvanó los lienzos, fue demolida. Fui el único que protestó ante Gobernación, ante la presidencia de la república, ante Bienes Nacionales, pero llegó tarde la respuesta. Ya había sido demolida y perdimos así una joya verdaderamente histórica. Lo mismo sucedió con el Primer Palacio de Gobierno. Lo demolieron, y a pesar de las protestas lo hacen en tres horas. Actualmente se traen máquinas y una construcción de adobe la demuelen de prisa, cuando protesta uno, ya están abajo”.
-¿Cuál es tu mensaje?
“Que sigamos siendo verdaderamente mexicanos, que cada vez nos sintamos más orgullosos de ello, que respetemos nuestros símbolos patrios que tenemos como son la bandera, el escudo y el himno. Por eso yo concluyo diciendo que los mexicanos tenemos tres símbolos patrios que se resumen en dos que queremos y respetamos con profunda fe: el Himno, que es la Bandera que se canta y la Bandera que es el Himno que se ve”.

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