PRIMERA PLANA

Denuncian ante el CU a delegado

sindical y coodinador académico 

El delegado del Sindicato de Trabajadores Académicos de la UAG (STAUAG) en la Facultad de Comunicación y Mercadotecnia de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), Samuel Bautista Nava, y el coordinador de la Academia de la misma, Ángel Carrillo Chora, así como otros ocho profesores, entre ellos un importante funcionario de la administración central, fueron denunciados ante el Consejo Universitario.

En un escrito presentado ante la Secretaría Técnica de la máxima autoridad universitaria, en la Rectoría, en el Comité Central del STAUAG, y ante las instancias defensoras de Derechos Humanos, nacional y estatal, el profesor Elino Villanueva González pidió que la Comisión de Honor y Justicia del Consejo Universitario atraiga el expediente DDHU/142/2015 con todos los detalles de “la más cruel infamia en los 29 años de historia” de la escuela y determine lo conducente.

La denuncia involucra a una decena de personas, pero particularmente al delegado sindical y al coordinador de la Academia, Bautista Nava y Carrillo Chora, como los principales promotores de una campaña de difamación en contra del profesor Villanueva González en la institución, bajo el argumento de que sus títulos eran falsos y que para octubre del año pasado estaría en la cárcel porque “su caso no tenía solución”.

“El maestro Chora les anduvo diciendo a los alumnos, para asustarlos y ponerlos en contra mía, que tendrían que volver a cursar todas las materias que llevaron conmigo porque mis estudios y mis títulos eran falsos, y ya había escogido mis materias con las que se iba a quedar, y el señor Bautista Nava se fue a burlar de mí ante los grupos con el mismo pretexto, y en reunión de la delegación sindical los dos promovieron un acuerdo de unanimidad para pedir mi inhabilitación como consejero de unidad y mi despido de la escuela”, explicó el maestro afectado.

“Sus actitudes —añadió— contravienen de forma flagrante los principios elementales que rigen el funcionamiento de la Universidad y la convivencia entre la comunidad universitaria, fundados en la ética, la solidaridad, el respeto a la dignidad humana y el derecho a un ambiente sano de trabajo, lo que obliga a que sean juzgados por la Comisión de Honor y Justicia del Consejo Universitario, pues ni como Academia ni como delegación ni como compañeros de trabajo tienen facultades y competencias para ello”.

La solicitud del maestro difamado se basa en que el expediente no ha avanzado desde enero de este año porque no se ha nombrado a un titular en la Defensoría de Derechos Humanos, cuya coordinadora hasta entonces, Leticia González Peralta, únicamente concretó dos comparecencias de conciliación, mientras que los ataques han continuado con el fomento de un clima en contra de su persona en la escuela. “Tengo temor porque es gente que no tiene escrúpulos y pueden llevar su agresión más allá del daño moral que ya me han causado”, expresó.

Respecto del funcionario de Rectoría que está protegiendo a sus agresores por pertenecer la mayoría de ellos a un grupo político, el profesor dijo que en su momento los propios involucrados tendrán que decir quién es y de hecho en el expediente ya existen testimonios con nombres y apellidos de las demás personas relacionadas en el caso, así como las amenazas graves que se han expresado y que ponen en riesgo, incluso, su seguridad física. “En cuanto la Comisión de Honor y Justicia atraiga el caso podremos conocer todos los nombres y los pormenores del caso”, dijo. 

Entre los profesores relacionados en la indagatoria de la DDHU figuran el líder del grupo, Aleida Tello Divicino, Paulina Hernández Mejía, Gabriela Arcos Mastache, Gonzalo Castañón Arcos, Luis Raúl Vélez Carbajal, Iván Gallardo Bernal y Jesús Chávez García, así como Bautista Nava y Carrillo Chora, “quienes lejos de reconocer su error y ofrecer una disculpa, como ya se propuso en el expediente, se hacen los enojados y algunos hasta amenazan con demandarme legalmente”, dijo el afectado.