viernes, 18 de noviembre de 2016

COLUMNA

 La caída del
Halcón Negro


Apolinar Castrejón Marino
“El que juega sabiendo que va a ganar, es un tramposo, pero el que juega sabiendo que va a perder es un ++++dejo”.
Hillary Clinton se sentía heredera de la Casa Blanca, desde que su marido fue Presidente, pero el 8 de noviembre, fue como si la hubiera atropellado un camión, y nadie puedo anotar las placas.
Lo mismo les pasó a los “politólogos”, analistas políticos y “líderes de opinión” que entendieron mal la historia reciente, o creyeron que la gente de Estados Unidos no tiene memoria. Lo más seguro es que también fueron víctimas de la alteración de la realidad política, económica y social que realizan los “mass media” por encargo del gobierno.

Según parece, nadie tomó en cuenta el descontento de los ciudadanos norteamericanos, que se vieron obligados a soportar durante 8 años a una familia de moros en la casa blanca. Las denuncias de que Michelle era un travesti y de que Obama había sido sacado del anonimato para que operara a favor de intereses capitalistas judíos, fueron acalladas de inmediato.
Tampoco tomaron en cuanta la percepción generalizada de que la democracia ya no funciona. Esa palabreja bajo la cual se ocultan la corrupción, la explotación de los trabajadores, y la complicidad de las autoridades con los criminales.
Algo completamente diferente de lo que significaba democracia para Lincoln o para Jefferson, o para Washington, quienes emprendieron encarnizadas luchas para que los norteamericanos vivieran con equidad y justicia.
¿Y cuál será el significado de democracia para los “mexicanos” que a la primera oportunidad se escaparon de México? Las manadas de artistas de medio pelo: chistositos, mujerzuelas y depredadores de la “política mexicana”, se fueron a vivir al país vecino, porque el suyo se les hizo poca cosa.
Y ahora, nuestros atarantados compatriotas, se suman a otros inmigrantes, que se dicen sorprendidos de la intolerancia, que se ha desatado desde el triunfo de Donald Trump en contra de las minorías raciales en Estados Unidos.
¿De verdad se les olvidó, o no saben que en los Estados Unidos permea la discriminación, el clasismo y la exclusión? ¿Se les olvidó a los mexicanos con corazón gringo, que “…el muerto y el arrimado, a los 3 días apestan”?
Los mexicanos que viven como “parches mal pegados” en los Estados Unidos, no podían saber que los ciudadanos norteamericanos se sienten engañados por Obama quien les repetía en su campaña: “Yes, we can” (si podemos), y como presidente, no pudo evitar que el liderazgo norteamericano fuera rebasado en el continente, y en el mundo.
Obama acarreó a los norteamericanos niveles de inflación y devaluación nunca antes vistos. La economía norteamericana durante este gobierno, fue ampliamente superada por China y otros países recientemente industrializados.
El déficit presupuestario se ubica en 1,2 billones de dólares equivalente a 8,3% del Producto Interno Bruto; una cifra extraordinariamente desastrosa. La tasa de desempleo en Estados Unidos es de 10%, mientras que en China se originan cada año, esa misma cantidad de empleos.
Todo esto afecta a las familias norteamericanas, pero Obama no ha querido hablar claramente de esta problemática, hasta que vino Donald Trump a decirlo bien claro ¡Es culpa de los inmigrantes ilegales! Cierto o no, los norteamericanos sintieron que alguien les hablaba con verdad.
Ahora que la familia presidencial va quedando desprotegida y huérfana del poder, las críticas y la mala voluntad que les han tenido los ciudadanos norteamericanos, se desbordará; como los insultos que gustan de expresar contra la “primera dama”:
Pamela Ramsey Taylor, dirigente y activista del condado de Clay donde solo viven 490 personas, escribió en su cuenta de Facebook: “Será refrescante tener una elegante, bella y digna primera dama en la Casa Blanca. Estoy harta de ver a un chimpancé con tacones”, refiriéndose a  Michelle Obama.
La cosa subió de color cuando la alcaldesa Beverly Whaling,  respondió con otro comentario: “Esto acaba de hacerme el día, Pam”. Periódicos estadounidenses, aseguran que la alcaldesa fue depuesta de su cargo, y que Pamela fue despedida de su trabajo, lo cual se duda, pues muchas gentes celebran estos comentarios.

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