martes, 15 de noviembre de 2016

COLUMNA

 El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez


 Y fuimos a ver a Rosario Espinoza. -.La puntualidad que es una base para la gente disciplinada. -.Despilfarro de los dineros de la UAGro. -.Antaño, no se permitía la injerencia del Estado.
 
  Y fuimos a verla; sí, fuimos a ver a María del Rosario Espinoza Espinoza, la taekwondoista reconocida internacionalmente, medallista olímpica de Río 2016, se presentó en la cancha de fútbol de la Universidad Autónoma de Guerrero, UAGro, como actualmente le hizo llamar el “reptor”, Javier Saldaña Almazán a quien, por cierto, solamente le faltó que a los baños u sanitarios –la “u” es a propósito –le llamaran por su
nombre; pues bien, nosotros reprobamos a la atleta por su impuntualidad, pues se supone que el evento estaba programado para iniciarse a las 16:00 horas y no después de las cinco de la tarde; es decir, si ella hubiese sido mi alumna, seguro no hubiera entrado a mi clase, porque a nosotros nos gusta la puntualidad que es una base para la gente disciplinada; esto es, no podemos exigir disciplina a los demás, cuando nosotros somos indisciplinados; quizá la culpa la tuvo el “reptor”, a quien le encantan los reflectores, le encanta que la prensa se agache ante su paso, de tal forma que, cuando bajaron de la camioneta, precedida por una decena de guaruras, hubo personal de la “prensa” que no repararon en Rosario Espinoza, sino que buscaron la entrevista en el “reptor” quien, por cierto, asumió el peñanietismo –quizá para estar a tono con los tiempos del ignorante y maquiavélico muñeco de plástico –al hacer una serie de cabriolas al momento de la inauguración de la “clínica” que impartiría, minutos después, la medallista olímpica; de ahí, todo lo demás salió “de poca”, de época para la muchachada que se dio cita en las canchas universitarias, pues acudieron para venerar a la ídola de la disciplina de defensa personal que arrancó el aplauso del respetable, con esa gallardía que la caracteriza; en fin, se notó un despilfarro tremendo de los dineros del presupuesto de la UAGro, pues nos enteramos que la atleta olímpica no fue de gratis, por lo que se deduce que recibió una buena cantidad de billetes para presentarse en el otrora estadio “Andrés Figueroa” –también deducimos que ahora se llama “Javier Saldaña Almazán –pero también nos enteramos que el señor “reptor” ha vociferado que el recorte presupuestal que ha “sufrido” la Universidad de Guerrero no le permite recibir a ningún alumno más, pues no se tendría la capacidad de brindarle el servicio educativo; en fin, así se las gasta el “regente” general de nuestra máxima casa de estudios, otrora institución luchona que no permitía la injerencia del Estado en la vida universitaria, ahora entregada al mejor postor –más bien, al gobernante en turno –atrás han quedado los ideales de los Mártires del 60, los que entregaron su vida por la “Autonomía Universitaria” y más de un catedrático sufriera la terrible represión hace unas cuantas décadas, cuando le suspendieron el subsidio y dejaron de cubrir los salarios a los trabajadores que sobrevivieron gracias a la solidaridad del pueblo de Chilpancingo; en fin, veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: elahuizotejr@hotmail.com

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