viernes, 14 de julio de 2017

ARTÍCULO

20 de Julio, Dia Nacional del Bibliotecario
Apolinar Castrejón Marino

A la llegada de los españoles, el bibliotecario se llamaba Amoxtlaltlitzin, que significa “Venerable Señor Entre los Libros”. Los libros eran los códices, pliegos de piel o tejidos, pintados a mano, que se llamaban amoxtlis.
Los lugares donde se guardaban los códices se llamaban amoxcallis, que eran las bibliotecas de entonces.
En la actualidad la percepción que tenemos de que biblioteca es el mundo de las palabras y las ideas. Según opinión de  Luisa Mireya Carbonell Arreaza: “Es un espacio donde se albergan los signos de la Cultura”.
Todos sabemos que la misión de la biblioteca es apoyar a la gente en sus estudios, en su trabajo y en cualquier actividad a la que dedique su tiempo e interés.
Pero, es muy importante tener en cuenta que un cúmulo de libros dispuestos en
estantes y una sala para leer, no hacen una biblioteca. Lo importante son los SERVICIOS BIBLIOTECARIOS.
La recuperación de la información es el servicio bibliotecario más importante. Apoyar a la educación, reuniendo los programas y los textos escolares oficiales, para ponerlos a disposición de los maestros y los alumnos, es otro servicio indispensable.
Todos los servicios son de calidad, profesionales y gratuitos. Desde luego que para que los libros sean útiles, deben estar catalogados, clasificados y convenientemente acomodados, de acuerdo a su contenido.
También es necesario que se encuentren respaldados por un catálogo o fichero, que facilite la búsqueda por autor, título o contenido. Estos son los servicios bibliotecarios tradicionales.
Destacamos esto, porque la biblioteca moderna brinda acceso a los servicios digitales a las personas de escasos recursos económicos, o que viven en zonas marginales; para que no se queden sin aprovechar las nuevas tecnologías de información y comunicación.
Pero entonces, ¿Por qué la gente ya no acude a las bibliotecas? Es un hecho notable que las bibliotecas permanecen vacías de usuarios. Aunque tengan las mejores colecciones de libros, estén equipadas, y cuenten con servicios automatizados.
El bibliotecario está adecuadamente entrenado, para poder ubicar cualquier tema, en el amplio mundo de los libros, diccionarios y enciclopedias, con economía de tiempo y esfuerzo.
Posee estrategias y habilidades para desentrañar la solicitud de un libro o un tema, por más que el usuario no sepa expresarlo convenientemente. Es un hecho comprobado que una buena entrevista técnica, saca a la luz lo que verdaderamente desea el usuario. Pero entonces, ¿Por qué la gente no acude a las bibliotecas?
Evidentemente se les hace más fácil “investigar”, y hacer sus deberes escolares desde su casa, porque ahora cuenta con computadoras e internet. Pero la cuestión es más seria. El bibliotecario ha dejado de ser útil, y los libros son dispensables. Google lo tiene todo.
Según las investigadoras Luisa Mireya Carbonell Arreaza (a quien mencionamos anteriormente), Anavel Guardado Medina Rosa Elena Ramírez, e Isela Vargas Valencia, que escribieron el ensayo: “Interés colectivo: un recurso para elevar la calidad de los servicios bibliotecarios”.
El cual expusieron en el 4° congreso Nacional de Bibliotecas: “Avances del Programa Nacional de Cultura en las Bibliotecas Públicas”, realizado del 23 al 25 de septiembre de 2014 en Toluca, Estado de México.
“Para sacar una biblioteca en estado de desesperación, y transformarla en una institución eficiente y dinámica, se requiere hacer ofertas de nuevos servicios y nuevos materiales. Pero esto requiere que los bibliotecarios estén actualizados con las nuevas dinámicas de la sociedad, con los nuevos instrumentos y herramientas, y las nuevas modalidades de comunicación”.
“… el directivo debe tomar en cuenta que La participación es el compromiso mental o emocional de una persona en situación de grupo, que lo anima a contribuir en el logro de metas”.
“Entonces, no debe estandarizar el desempeño de los trabajadores, relegándolos a tareas aisladas, repetitivas y carentes de oportunidades para que demuestren responsabilidad, creatividad, independencia y confianza en sí mismos”.

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