lunes, 7 de agosto de 2017

NOTA

Derroche en comida
y mezcal con Jesús
Alejandro Ortiz.--Cientos de fieles católicos en Chilpancingo, se concentraron como cada año en la calle Justo Sierra de Chilpancingo, para pedir, con un ritual, abundancias.
Luego de una liturgia de la palabra, celebrada por el controvertido sacerdote maronita, Jesús Cuevas, quien fue separado de celebraciones eucarísticas durante el obispado de Alejo Zavala Castro, los capitalinos arribaron a un domicilio particular de la colonia Centro.
El rito, que cumple 20 años de celebrarse, es encabezado por el sacerdote, quien luego de la misa elige comida que fue llevada en honor a “El Padre Jesús” o “tatachú”, por sus
orígenes, y es aventada a los fieles católicos junto con litros de mezcal.
Este rito, en Guerrero, tiene sus orígenes en el municipio de Mochitlán, cuando por tres temporadas, los campesinos perdieron sus cosechas a consecuencia de las lluvias y la creciente del río, por ello se encomendaron a “tatachú” para pedir abundancia en sus cosechas, las cuales tuvieron.
“Es una ceremonia de abundancia y bendición, la gente le pide a la Santa Cruz, a la Abuelita Santa Ana (madre de la virgen maría de acuerdo a los cánones católicos) y a tatachú, que den abundancia de comer, que haya buenas cosechas”, explicó el sacerdote Jesús Cuevas.
La tradición, consiste en bañarse de la comida, generalmente pozole, mole y mezcal, en representación del “exceso de bendiciones”, y posteriormente arrojar las cazuelas al aire y de romperse, será señal de abundancia.
Niños, adultos mayores, personas enfermas y más, son los primeros en estar frente al sacerdote para ser bañados de la comida que es arrojada a quienes se concentran en el lugar.
Jesús Cuevas, fue separado del ejercicio eclesiástico por diferencias con el obispado, son embargo ha reiniciado sus acciones desde le llegada del obispo Salvador Rangel Mendoza y anunció que ya tiene asignada una parroquia para seguir ejerciendo su sacerdocio. (bajopalabra.com.mx).

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