miércoles, 27 de septiembre de 2017

POLICRÓNICA

Pirrurris...Con la “moda” de los dirigentes nacionales de partidos políticos en “renunciar” financiamientos hasta el 100 por ciento, en Guerrero, “El Pirrurris tricolor”, Heriberto Huicochea Vázquez, anda lloriqueando si le “cortan” la tetera se paralizará “su” partido.

El tecnócrata político analfabeta que no conoce los sentimientos del pueblo, y que por dedazo ahora se dice dirigente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional, Heriberto Huicochea Vázquez, perfecto desconocido por la militancia suriana y que no sabe cómo se gana una elección, solamente gastarse los dineros que tiene de manera fácil y ocupar cargo sin merecerlos, ahora anda llorando de que no está de acuerdo con su también perfecto desconocido dirigente nacional, Enrique Ochoa Reza, quien no solo está proponiendo ante las autoridades del Instituto Nacional Electoral en renunciar para gastar 258 millones de pesos que corresponde de aquí al final de año, sino también quitar más de 680 diputados plurinominales en el país y otras  linduras. Eso no le agradó nada al “pirruris tricolor suriano”, se queja amargamente que si deja de recibir las prerrogativas, “su” PRI se paraliza. Eso significa que desde ahora se está deslindando públicamente de las derrotas estrepitosas que habrá de tener en las elecciones concurrentes del 1º de julio del 2018. Si no puede con el cargo, que renuncie y los militantes los deje en libertad que pongan a otro que realmente sea disciplinado, audaz y sobre todo que conozca el PRI para establecer acciones que permitan garantizar triunfos, entre ellos gestoría financiera para fortalecer las actividades partidistas. Lo que queda claro que es un verdadero parásito que no sabe cómo se gana el dinero para conducir una empresa o un partido como el que ahora tiene casi en ruinas. Sus detractores no dudan en afirmar que ha sido un mantenido del sistema durante décadas y su actuación política ha sido oscura en todos los sentidos, porque además afirman que le hace al “mago” con los recursos del erario público.  Ahora lo han enviado a resucitar al anticipado “muerto tricolor”, porque las elecciones nacionales y de Guerrero le serán un fiasco, porque los resultados que ofreció el ya casi  virtual ex presidente de México, Enrique Peña Nieto y el cuestionado papel que deja mucho que desear el del “orden y paz”, Héctor Antonio Astudillo Flores, los resultados serán peor que los sismos del 7 y 19 de septiembre en curso, aunado a lo que dejó el huracán uno “Max”. Por lo tanto los damnificados se incrementarán   desde este septiembre patrio en que se entonan el himno nacional y la melodía “cielito lindo”, eso es lo que habrá de repetir en el 2018 el tal “Huico” quien dese ahora ya le están cantando las golondrinas para dejar la ubre del pueblo. La amargada queja que hace Huicochea Vázquez es que el 95 por ciento de los gastos que enfrenta el PRI anualmente en Guerrero los solventa con al financiamiento que le otorga el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), monto que este año fue de 34 millones 313 mil 872 pesos. En caso de que la dirigencia estatal del PRI renuncie también al financiamiento público que perciben anualmente, como lo hará el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), existe el riesgo de que el partido se “paralice” declara con los ojos llorosos porque no tendrá aguinaldo, ni pavo el pirruris tricolor. El seudo presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), explicó que en el ámbito local pueden hacerse reducciones a los ingresos del PRI, pero consideró que no hay condiciones para que renuncie al cien por ciento de sus prerrogativas. Argumentó que el partido tiene obligaciones financieras mensuales como el pago de nómina, energía eléctrica, teléfono y combustible, indispensables –dijo- para la operatividad del tricolor, razón por la que consideró que no es viable dejar sin financiamiento a la dirigencia estatal. Incluso dijo que ese no es un tema que el CDE se esté planteando en Guerrero. Obviamente que le causa no solo escozor en el cuerpo, sino ya le está dando diarrea de pensar que no va a poder pagar el fin de año salarios y aguinaldos, en la que están incluidos los embutes que entrega mensualmente a los periodistas para que le difunda sus “exitosas actividades”, que no son otra cosa que andar posando para la foto y  su inútil y malagradecido jefe de prensa, Francisco Rangel de la Cruz, quien se ha convertido en otro parasito del erario tricolor. Otra de las cosas que dice Huicochea Vázquez que no es posible librar los compromisos financieros solamente con las aportaciones de la militancia, que en el estado es de aproximadamente dos millones 600 mil pesos, como lo proponen el PRD, PAN y Movimiento Ciudadano. Con eso se comprueba de que es un tecnócrata que sabe hacer proyecciones y hacerse chaquetas mentales como resolver los problemas,  que no es lo mismo estar al frente de una empresa independiente y que se tiene que luchar diariamente para obtener ingresos y no esperar con las manos estiradas financiamientos provenientes del erario, que no es otra cosa que los impuestos del pueblo. Los partidos políticos viven de los impuestos,  no de lo que generan los militantes, no obstante que son empresas de interés público. En su última declaración que leímos fue de una verdadera plañidera, al explicar que del total de gastos que enfrenta el PRI anualmente, el 95 por ciento los solventa con al financiamiento que le otorga el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), monto que este año fue de 34 millones 313 mil 872 pesos. Pero para salir “airoso”  y tratando de recomponer su desafortunada declaración que contraviene a los lineamientos de su dirigente nacional Ochoa Reza, aclara que el Comité Directivo Estatal no se niega a una reducción de sus ingresos, incluso comentó que en caso de que el CEN del PRI deje de percibir el cien por ciento de su financiamiento, la dirigencia estatal perdería cuatro millones anuales, que era la aportación del nacional. Aunado a ello recordó que 2018 es año electoral, por lo que es indispensable que la dirigencia estatal tenga financiamiento para la contienda, así como para cursos de capacitación, campañas de afiliación y propaganda institucional. “Nosotros no nos oponemos a una reducción considerable de nuestro financiamiento, podemos disminuir los gastos en varios conceptos, pero ¡Imagínate que no hubiera campañas! Es algo que se debe reconsiderar, sobre todo para salvar los gastos de operación, de lo contrario caeríamos en el inmovilismo”.  Por supuesto que no, porque como todo  un pirrurris, está tembloroso que no va a tener ingresos y no sabe cómo manejar el problema financiero, todo lo quiere resolver pidiéndole a “papá gobierno”, además queda demostrado que como tecnócrata es un verdadero fracaso.…Insultado…Como opositores al sistema de gobierno, son excelentes, pero cuando ya son gobierno, son pésimos, les sale el autoritarismo, prepotencia y lo peor la hambruna por el poder y el dinero. En Guerrero, ya experimentamos por 10 años y medio lo desastroso en como gobernó el Partido de la Revolución Democrática (PRD), ahora mismo y lo bueno para los habitantes del vecino estado de Morelos, en donde desgobierna el perredista, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu de quien se esperaba que hiciera un gobierno estatal ejemplar, honesto y transparente. Desde el momento en que asumió la gubernatura, Garrido Abreu demostró de lo que estaba hecho, mucha hambruna de poder y dinero, además novato en la lides de gobernar, y logró unir a la gente, pero en su contra, al pelearse con todo mundo, entre ellos el rector y toda la comunidad de la Universidad Autónoma de Morelos y otros sectores importantes, inclusive con el presidente municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, quien ahora mismo amenaza con ser el futuro candidato a gobernador de Morelos, y cuando llegue al cargo, le habrá de cobrar todas las facturas a Garrido Abreu. En fin, son más desaciertos que aciertos, y ahora que la población morelense está sufriendo por los estragos del terremoto del 19 de septiembre, se ha evidenciado del repudio que ha acumulado el gobernador perredista  Garrido Abreu. Esto quedó de manifiesto, el día de ayer martes, cuando por tercera ocasión en una semana, pobladores damnificados por el sismo del 19 de septiembre protestaron en contra del Gobernador de Morelos, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu. Esta vez fue en el Pueblo Mágico de Tlayacapan, donde el mandatario perredista acompañó  al Presidente priista Enrique Peña Nieto en su visita a la comunidad, una de las afectadas por el terremoto.Al concluir su discurso, Peña Nieto cedió el micrófono al Gobernador Graco Luis Ramírez Garrido Abreu y de inmediato comenzaron  las protestas en su contra. “¡Fuera Graco!”, “¡Entrega los víveres!”, “¡Cállate!”  Fueron algunos de los gritos lanzados contra el mandatario. Ese es el repudio manifiesto de una sociedad agraviada innecesariamente por un mandatario del PRD de quien se esperaba hiciera un excelente papel, porque venía de un partido de oposición y que nació de las bases más pobres de la sociedad, pero desafortunadamente los políticos fallan y luego cosechan lo que sembraron, el repudio ciudadano.

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