miércoles, 29 de noviembre de 2017

SEGUNDA PRINCIPAL DE NOTA ROJA

Venganza de Navarrete el
desplome de helicóptero
No fue un accidente, sino una venganza del dirigente del cártel de la Sierra, Isaac Navarrete Celis, el desplome del helicóptero de la Secretaría de la Defensa Nacional en la que murió el piloto cuando realizaba labores de fumigación de plantíos de amapola.
La tarde de hoy miércoles trascendió de que estos hechos ocurridos en la Sierra de Guerrero, del Ejido de Los Morros, en el lugar conocido como “Piedras Pintas”,
perteneciente al municipio de Leonardo Bravo, y que queda a unos 3 kilómetros de Campo de Aviación, en una brecha que conduce a un poblado llamado La Escaleras. donde el cartel sureño preparó una trampa dé alambres para que callera la aeronave que se encontraba haciendo trabajos de fumigación para erradicar los plantíos de amapola.
El atentado ocurre después de que el Cartel del Sur-UPOEG, amenazaran al gobernador priista Héctor Antonio Astudillo Flores para que parara los operativos de erradicación de los plantíos de amapola en el municipio de Leonardo Bravo, Municipio donde operan estos carteles y quienes además, también le reprochan al mandatario las sumas de dinero que recibió de parte de ellos para su campaña.
Refieren que este hecho, se perfila como un desquite de Isaac Navarrete Celis, según habría pagado una fuerte suma de dinero que recolectó de todos los campesinos que fueron obligados a pagar mil pesos por cada pedazo de amapola que tenían sembrado; dinero que se le entregó a los mandos corruptos de la Policía Federal los cuales no cumplieron con lo pactado y continuaron erradicado la planta base de la heroína.
También se conoció que hubo una reunión hace algunas semanas en un conocido bar de Chilpancingo donde se presentó personalmente Isaac Navarrete Celis y un representante de la policía estatal y el secretario de seguridad pública de Chilpancingo, Esteban Espinosa Montoya.
En esa reunión, se habría pactado con fuertes sumas de dinero donde el encargado del bar “Aerogol” fue el enlace con las autoridades para la entrega de las “mochadas”.
En ese encuentro, la policía Federal se comprometió a no destruir los plantíos, y la policía municipal de Chilpancingo acordó vestir a diez sicarios del cartel del sur como policías municipales y subirlos a las camionetas mezclados con los agentes municipales, con la finalidad de ubicar a sus contrarios y cuidar la plaza.
Ahora se sabe, que casualmente el helicóptero fue derribado en los terrenos de Rafael Medina Hurtado (a) “El Gordo” lugarteniente de Isaac Navarrete Celis en Filo de Caballos.

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