NOTA

Martes 13, ¿sabes por qué se
dice que es de mala suerte?

Existen diferentes historias que se han utilizado a lo largo del tiempo para explicar el miedo irracional que provoca este día en muchos países
 Todo el mundo ha escuchado alguna vez un famoso refrán referido a días como hoy, que dice “en Martes 13 ni te cases ni te embarques ni de tu casa te apartes”.
Refleja el rechazo que sienten las personas supersticiosas al martes

13, que se da, de media, dos veces al año. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cuál es el origen de esta creencia?
Existen diferentes historias que se han utilizado a lo largo del tiempo para explicar el miedo irracional que provoca este día en muchos países, entre los que se encuentra España, Grecia y algunos de América Latina, como Argentina, México, Chile, Perú, Colombia o Venezuela.
El 13 es considerado el número de la mala suerte por diversos motivos, por ejemplo, en la última cena, eran 13 los asistentes, siendo Judas este último, quien traicionó a Jesucristo. Continuando con la religión cristiana, observamos que en el capítulo 13 del Apocalipsis se habla de la llegada del Anticristo a la Tierra.
En España, esta tradición se remonta precisamente al siglo XIII, concretamente el 13 de octubre de 1276, cuando Don García Ortiz de Azagra cayó junto a la mayoría de la población de Játiva (Valencia) en una batalla frente a los musulmanes.
También tiene un origen en la cultura escandinava. Según su mitología, Loki, el espíritu del mal, era el 13º invitado a la cena de los dioses en el Valhalla. Esta teoría recuerda a la de la última cena.
Por último, no podía faltar el Tarot en el mundo de las supersticiones. La carta número 13 es la que representa la muerte y la desgracia eterna.
¿Y el martes?
Etimológicamente proviene del planeta marte, relacionado con la destrucción, la sangre y la violencia, además de ser el Dios de la Guerra en la mitología romana. El temor a este día también se debe a la caída del Imperio Romano en Constantinopla, el martes 29 de mayo de 1453. De la misma manera, se dice que la confusión de las lenguas en la Torre de Babel, también tuvo lugar un martes.