miércoles, 23 de mayo de 2018

ARTÍCULO

Meade… más allá
del post debate
Efraín Flores Maldonado*
“Los hombres cambian con gusto de señor, creyendo mejorar; y esta creencia los impulsa a tomar las armas contra él; en lo cual se engañan, pues luego la experiencia les enseña… que han empeorado”. Maquiavelo.
Después del debate…y del post-debate inmediato, hemos visto y oído diversas opiniones coincidentes y disidentes sobre el contenido y valor de las respuestas de los aspirantes presidenciales. En algunos segmentos televisivos, se ha demostrado que algunos de ellos mintieron, inventando o manipulando datos y cifras. Sin embargo, una mayoría significativa de los opinologos y politólogos, así como representativos ciudadanos de la participativa sociedad civil, coinciden en el hecho de que el candidato del PRI, fue el más mesurado y racional en la mayoría de sus respuestas y opinio
nes. Todavía está en movimiento el efecto inmediato que dicho debate tendrá en el dibujo en construcción, en el crecimiento de las preferencias ciudadanas electorales. Hasta este momento, lo que parece ser cierto, es que el candidato del PRI, ya está ubicado en un complejo segundo lugar. La experiencia real que cada candidato extraiga del citado debate, seguramente servirá para mejorar estrategias, corregir errores y superar insuficiencias. Antes del tercer y último debate, los encuestologos habrán de decirnos en qué lugar se encuentran los candidatos presidenciales. Seguro estoy que el candidato tricolor estará ya muy cerca del puntero de la contienda. Porque es verdad clara e histórica, que los aciertos, errores y defectos de los candidatos, pesan significativamente días y horas antes de que los ciudadanos emitan su voto; pesan en el cambio de opinión de los indecisos y quizá también provoquen el ánimo de votar en quienes históricamente han sido abstencionistas. Rene Juárez Cisneros, el emergente y sorprendente nuevo líder nacional del PRI, lo dijo claramente en su entrevista de este martes 22 por la noche con Joaquín López Dóriga. Esta no es una elección cualquiera; no es para elegir a un candidato y si en cambio lo es para designar al próximo presidente de México. Por lo tanto, será de mayor peso en la conciencia ciudadana, la necesidad de no tener un presidente experimental, aventurero y contrastante, sino un ejecutivo federal de reconocida experiencia en el servicio público, probadamente honesto, con una real condición de ciudadanía, que lo lleve naturalmente a propiciar la unidad en la diversidad de la sociedad civil y no un presidente que divida a la nación. Rene Juárez mostro en esa entrevista, el contenido de su extraordinaria cultura y formación política. No confrontó a los líderes partidistas representantes de los candidatos opositores; al contrario, expresó su respeto para ellos y utilizó su tiempo en difundir los propósitos fundamentales del candidato de su partido. Con esta fotografía de propuestas y de unidad política, que es la mayor riqueza de los pueblos, es posible el crecimiento gradual de José Antonio Meade Kuribreña, para tejer con hilos de oro y con prudencia activa, el triunfo del PRI en la contienda presidencial. Se dibujará el rostro de un nuevo país, transitando con certeza, hacia la maximización del bienestar de los mexicanos. *Doctor en Investigación en Ciencia Política.

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