COLUMNA

DH-1-07-18
Tino Gatica

En los planteamientos que estoy esbozando en estas primeras colaboraciones sobre el antes y después del 1 de julio del año que está corriendo como un “Correcaminos” que es perseguido por el coyote Rufo, es menester recordarles de la importancia que están adquiriendo las organizaciones y asociaciones civiles, quizá siempre han tenido importancia, sin embargo, depende de las personas que  las integran las que permiten contar con esa confianza, esa certeza. Es lo que se conoce como credibilidad. Durante estos meses previos a la toma de protesta del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, a realizarse el 1 de diciembre es que todavía mantendrá una agenda que le permi

tirá marcar la diferencia con el todavía presidente priista Enrique Peña Nieto. Es notorio que una cosa son las promesas o compromisos de campaña y otra distinta la puesta de tales asuntos, o bien que todos sean una realidad, pero como lo he dicho hasta antes de esa unción no puede disponer de nada, físico o material, así es que tendremos que esperar. Durante toda esta semana que hoy viernes 20 de julio se termina pues “La Crónica, vespertino de Chilpancingo” respeta la semana inglesa, s estuvo abordando el fenómeno que significó AMLO y su partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el Partido del Trabajo que tiene años con su propia mística de servicio, mucho más que el Partido Encuentro Social (PES) que no encontró una respuesta plena de ahí que a nivel nacional ya no alcanzó su registro. Un partido menos, de muchos que tienen que desaparecer o fusionarse con otros que compartan estatutos y principios ideológicos semejantes, aunque se observó que ahora sí en el reciente proceso electoral se juntaron el agua y el aceite hasta donde se pudo. Mantengo mi tesis de que todavía con “El Peje” se permite el beneficio de la duda porque aún no es poder, pero desde el 1 de diciembre, ya veremos dijo el ciego, en tanto que la asociación, integración, reestructuración o refundación son conceptos que se estarán manejando para luchar como núcleo social (re)forzado…Saludos: ¡No me lo van a creer!, bueno, mejor sí me lo van a creer, pues ocurre que hoy 20 de julio, hoy, hoy estuve en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) estatal, buscando saludar a su titular, el ex alcalde de Chilpancingo, o sea a Mario Moreno Arcos. Y saben quéeeee, sí estaba, por lo que su personal confirmó que está atendiendo y trabajando hasta en vacaciones, cuestión que habla bien del citado funcionario. Mi visita, era para saludarlo y expresarle mi reconocimiento porque es de los funcionarios de primer en el gobierno estatal que mantienen una agenda llena, siempre con personas de toda la entidad que acuden a esa oficina para darle trámite a sus solicitudes y peticiones. Buen servidor público es MMA…Otro saludo: El todavía dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), don René Juárez Cisneros es el único que ha sabido decir las cosas como son en cuanto ocurrió el efecto de AMLO con su Morena (Movimiento de Regeneración Nacional) en donde en su mensaje dijo que se manifestó en las pasadas elecciones en el sentido de que hubo mucha simulación en el supuesto trabajo partidista, pero esto debe preocupar sobre todo a los que en verdad estaban manejando mucho dinero a costa de las estructuras a las que engañaban con despensas, refrescos o frutsis. Confirmo de que el priismo necesita una reestructuración o renovación de dirigentes o seudo líderes de seccionales que permitan que la militancia adquiera una buena atención y acompañamiento básico para poder ser una opción en los años que vienen…¡Uta ma!...Ahora resulta que muchos negocios no aceptan billetes de alta denominación como son los de mil pesos, debido a que se ha soltado una serie de fraudes en Chilpancingo pues esos billetes serán un dolor de cabeza para quienes los carguen, obviamente siempre y cuando se detecte que son falsos. Y para evitar estos problemas los encargados de varios establecimientos han dado instrucciones a su personal a que no reciba esos billetes, por temor  a que sean apócrifos. Con esa advertencia, espero que los lectores y lectoras que están solamente en mi familia, estén fibrillas y no reciban billetes de mil pesos, porque seguramente tendrán que ser dirigidos a cualquier banco para que les confirmen si éstos son buenos, se los cambien y puedan adquirir lo que a su gusto o necesidad les interese.