jueves, 23 de agosto de 2018

PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Gasta al año 60mdp
el mediocre IEPEN
Juan Manuel Molina.--Con un costo de cinco millones de pesos mensuales del erario público, el Instituto de Estudios Parlamentarios Eduardo Neri (IEPEN), apéndice inútil del Congreso del estado de Guerrero, ni transparenta el presupuesto asignado, ni realiza trabajos de relevancia para la vida legislativa, se ha convertido en una especia de mediocre editorial que publica libros de investigaciones históricas y sociales de dudoso rigor, principalmente de amigos y recomenda
dos de los diputados.
Este supuesto órgano técnico del Congreso local se creó el 29 de marzo de 1999. Tiene por objeto la promoción, el fomento y la realización de estudios e investigaciones que contribuyan a mejorar los procesos legislativos y la cultura parlamentaria. De acuerdo a la ley que le da origen, debe contar con un sistema de información jurídica y de los procesos parlamentarios del estado; la información de un fondo documental y bibliográfico sobre derecho público y materias relacionadas, pero nada de eso es funcional, ni lo que existe ha sido actualizado en 19 años.
El sitio web de este Instituto, es una página básica, bastante fea y que no actualizan. El menú de servicios de este sitio no arroja ninguna información útil, por ejemplo, en el botón de trámites y servicios, el usuario se cansa de darle click y sólo manda a unos absurdos formatos para donar libros, o solicitar préstamos de un catálogo que no existe en la página. Lo mismo ocurre con el botón de transparencia que sólo envía a dos archivos de 2017 donde dice que “El H. Congreso del Estado de Guerrero por el momento no ha generado estudios cuya elaboración contrate a organizaciones de los sectores social y privado”.
Pese a esta advertencia que dice: “por el momento el Congreso no ha generado estudios”, según la encargada de este Instituto, María Magdalena Vázquez Fierro, “durante los tres ultimo años, el IEPEN condujo un proceso de investigación documental en el Archivo General de la Nación, en el Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), y en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, para editar el libro ‘General Isidoro Montes de Oca, un costeño de la patria’, del autor Juan Correa Villanueva”.
Sobre este “proceso de investigación de tres años” no existe ninguna huella. Lo cierto es que el autor de libro “General Isidoro Montes de Oca”, no es un investigador, ni siquiera es un historiador. Se trata de un ingeniero que se empleaba en la siderúrgica de Las Truchas y que llegó a ser el tercer presidente municipal perredista, de Coahuayutla. Es un misterio cómo pudo hacer esta investigación de tres años para este libro.
¿A DÓNDE SE FUE EL DINERO?
Pero al Igual que la 61 legislatura del Congreso del Estado, su apéndice, el Instituto Eduardo Neri, no informa el destino de recursos públicos que ingresó para desarrollar investigación parlamentaria y jurídica en el estado, así como para el fomento y promoción de los procesos legislativos. No existe ningún indicio de cómo y en qué se gastaron su presupuesto. La fiscalización a fondo de este mal llamado órgano de investigación deberá ser una de las tareas pendientes de la nueva legislatura mayoritariamente morenista.
Al igual que otros cargos, la designación del responsable de este Instituto se da como cuota en la repartición de espacios entre las fuerzas políticas representadas en el Congreso, el nombramiento de la actual directora, correspondió a la cuota del Partido de la Revolución Democrática (PRD). A este Instituto los diputados envían a sus amistades a vegetar con cargo al erario público.
La actual encargada, María Magdalena Vázquez Fierro, es suplente de Dimma Guadalupe Salgado Apatiga, quien recientemente recibió su constancia como diputada electa por el principio de Representación Proporcional del PRD.
En más de dos ocasiones, se buscó contactar a Vázquez Fierro para que informara acerca de las actividades del IEPEN, sobre los proyectos de investigación y difusión, pero se negó a emitir opiniones. Al igual que hacen todos los demás funcionarios, anduvo varios días evadiendo los cuestionamientos y mintiendo sobre estar muy ocupada. Además de ocultar información de carácter público.
Al inicio de la actual legislatura, el órgano técnico de investigación recibía hasta cinco millones de pesos mensuales de financiamiento de parte del Poder Legislativo. El Congreso local, por su parte, se asignó 513 millones 413 mil pesos.
Para el ejercicio fiscal 2018, el Congreso del Estado se quedó con 609 millones 313 mil pesos, de los cuales, un total de 106 millones 319 mil pesos, fueron destinados a la Auditoría Superior del Estado (ASE).
Sin embargo, de todo este dinero no existe por ningún lado evidencia pública de en qué se ocupó. El manejo del dinero público del Congreso es casi un secreto de Estado prohibido para los ciudadanos que son quienes votan y ponen diputados.
De esta manera, el financiamiento público que recibe mensualmente el IEPEN, ni siquiera aparece referido en el proyecto presupuestal, es información que no se encuentra disponible en el portal de transparencia del Congreso del Estado, ni del propio instituto.
Este miércoles, Vázquez Fierro fue cuestionada sobre las actividades del instituto, mientras acudía al registro de diputados del PRD que integrarán la 62 legislatura del Congreso estatal.
Al preguntársele sobre el montó que recibe el órgano desconcentrado del Poder Legislativo, indicó que esa información, al ser pública, se encontraba en el portal de transparencia del instituto. Esta fue otra mentira más de esta funcionaria. En una consulta realizada al sitio web, se verificó que esa información no se encuentra disponible a pesar de ser una obligación.
Luego dijo lo que ya se mencionó líneas arriba, del proceso de investigación de tres años para editar el libro ‘General Isidoro Montes de Oca, un costeño de la patria’, del autor Juan Correa Villanueva.
DE INSTITUTO DE INVESTIGACIONES A CENTRO CULTURAL
Al parecer, la única actividad que realiza este rimbombante centro de estudios parlamentarios, es publicar esporádicamente una pésima revista llamada Altamirano. Esta es la publicación icónica del IEPEN, sin embargo, es editada con mal gusto y sin diseño alguno, con textos sosos y mal escritos. Según dicen, es difundida cada cuatro meses en el sitio web, pero en lo que va de este año sólo han editado un número, y para colmo, el material publicado es un trabajo realizado en 2016, trata sobre el contexto histórico de los Sentimientos de la Nación.
Respecto a libros, las últimas publicaciones han sido: ‘El buscador de hongos’, del autor Esteban Hernández Ortiz; ‘Las Campañas Militares de Vicente Guerrero en Tierra Caliente’ del autor Juan Correa Villanueva, así como ‘La Soberana Convención Revolucionaria 1914-1916’ de David Cienfuegos Salgado, este último, también es miembro del Consejo Consultivo, es decir, aprovechó su posición para publicarse un libro.
En los últimos meses, las instalaciones de este instituto, han sido destinadas para la presentación de libros, conferencias de prensa, talleres, obras de teatro, así como para la realización de foros, principalmente relacionados con el feminismo. Las escasas actividades realizadas corresponden a los años 2016 y 2017. La actividad más reciente, en junio, es la presentación de una novela llamada “Chernobil”, de autor x, casualmente presentada por María de los Ángeles Manzano Añorve, quien junto con David Cienfuegos, parecen ser los únicos que se benefician de este espacio, pues lo mismo dan talleres, que presentan libros, dan conferencias, etcétera.
Para la encargada, María Magdalena Vázquez, el instituto parece estar en un mundo idílico; se supone que no puede distinguir la mediocridad de lo realmente eficaz, eficiente y exitoso, para ella, el hecho de que ese instituto se convierta en una mala imprenta es un gran logro, pues dice:
“Consolidamos el hecho de que ahora el Congreso del Estado funja como editor público y persona moral, estamos hablando de que el Congreso, ante las instancias formales de la Secretaría de Educación, a través del INAH-autor, pueda editar libros con su propio sello editorial, esos son de algunas de las cosas que hemos logrado en el instituto”, señaló.
El IEPEN está integrado en un comité, que era dirigido por el diputado local priista, Ricardo Moreno Arcos, la siguiente figura a cargo, de acuerdo al organigrama, corresponde a la directora, Magdalena Vázquez Fierro. La dirección tiene cuatro coordinaciones en las que están: Jorge Aberlardo Adame Ávila, Misael Medrano Basa, José Torres García e Iván Villanueva Rodríguez, de acuerdo con el portal de internet.
Se complementa con un Consejo Consultivo, del que forman parte David Cienfuegos Salgado, Ricardo Infante Padilla, Jaime Salazar Adame, y José Gilberto Garza Grimaldo. La plantilla de trabajadores del órgano, no rebasa las 20 personas, aseguró la encargada.
Aquí puedes revisar por ti mismo las condiciones paupérrimas del portal de este llamado Instituto:http://www.iepen.org/ (bajopalabra.com.mx).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.