jueves, 22 de noviembre de 2018

POLICRÓNICA

Lloriqueos…Con lloriqueos ninguna empresa  social y privada se dirige, mucho menos con derrotismo anticipado, en todo caso la solución es cerrarlas y volver al confort en donde se estaba antes de asumir una responsabilidad y eso lo debió entender desde un principio perfectamente Antonio Gaspar Beltrán, presidente municipal de Chilpancingo, por el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Nadie obligó Antonio Gaspar Beltrán  para que por segunda ocasión buscara ser candidato a presidente municipal de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero,  fue su decisión personal por segunda ocasión por su  desenfrenada ambición personal para disfrutar las mieles del poder y a 52 días que asumió al poder, se ha convertido en una verdadera plañidera con sus lloriqueos y hasta de nalgas prontas. Lo peor de todo esto, se subió a un ladrillito y ya está mareado de poder, demostrando que es un malagradecido con todos los que lo ayudaron para llegar y en menos del tiempo perentorio, muchos no solo ya están decepcionados, sino hasta maldicen la hora en que los sorprendió con  su cuerpo de cordero y discurso demagógica de rancio priista, y ahora que ya está con las riendas del poder, ya no los ve, ni lo oye. Antonio Gaspar Beltrán no pierde ningún momento para presentarse ante los medios como la víctima de un MAL gobierno municipal que recibió, cuando decidió ser candidato y con la incertidumbre de que ganaría  las elecciones el 1 de julio, ya sabía que tendría en manos un Ayuntamiento devastado. Ahora que ya está sentado en la silla de la presidencia municipal de Chilpancingo, en lugar de ponerse a trabajar, está perdiendo legitimidad, credibilidad y hasta el respeto como autoridad y de continuar así, como lo anticipó con sus colaboradores de que antes de asumir el cargo, ya deberían llevar su renuncia firmada bajo el brazo en caso de no poder cumplir como servidores públicos, entonces él mismo debió aplicarse esa misma condición para estar como alcalde, tener lista su licencia  firmada  para presentarla en su momento ante el Congreso local, al no responder a los intereses de la sociedad de Chilpancingo que fincó muchas esperanzas del Cambio. Recordamos perfectamente que Antonio Gaspar Beltrán en campaña a cada rato les restregaba en la cara a los ciudadanos “Es tu proyecto…”, y otros más “Tú has invertido mucho en mi y el proyecto…”  y por supuesto muchos creyeron que efectivamente era eso, pero ahora que lo buscan en su oficina junto con sus colaboradores, no los reciben, mucho menos  responden a las llamadas de los teléfonos. Sabía perfectamente de que recibiría un Ayuntamiento agónico y colapsado en todos los sentidos, entonces ni recibió ni encontró ninguna sorpresa, por lo tanto ahora está obligado a cumplir lo que ofreció en campaña de que Chilpancingo recobraría su limpieza, su seguridad pública, ordenamiento de las calles y avenidas de tantos comerciantes ambulantes. Habría obra pública y muchas oportunidades de desarrollo para los ciudadanos, pero a más de un mes y medio, se ha dedicado al fácil lloriqueo, para ver si el Gobierno federal o estatal se compadecen, es decir, se hace la víctima plañidera, cuando anticipadamente sabía de que recibiría un “cadáver” al que le tendría que aplicar mucho oxígeno para que medio caminara y no esperar con nalgas prontas le ayuden a resolver el problema, pero  es la hora que sigue estando muerto y sigue llorando al lado del ataúd y si continúa con esa posición, auguramos que pronto habrá de solicitar licencia. Insistimos, ninguna persona en su sano juicio puede estar al frente de una empresa social, como Gobierno estatal,  federal y municipal, sea tarea fácil, y cruzarse de brazos esperando que venga el “espíritu santo” a resolver los conflictos. Debe entenderlo que ni una empresa social, ni privada se administra, se dirige  haciéndola de “La Llorona”, como lo está demostrando hoy en día el perredista Antonio Gaspar Beltrán, para que le ayuden a resolver los problemas que él mismo conocía desde antes. Igual sucede con una empresa privada, con muchos problemas y sobresaltos de todo tipo, muchas mujeres y hombres luchan a diario por mantener a flote sus modestas empresas particulares y que ofrecen empleos directos e indirectos, la mayoría de las veces con pérdidas y con pocos ingresos para el sostenimiento, sin contar de que están a la merced del hampa, pero cumplen su rol al servicio de los consumidores con mucha responsabilidad. Entre empresa social y privada, no hay ninguna diferencia, eso debe entenderlo perfectamente el presidente municipal Antonio Gaspar Beltrán, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), se cumple con las autoridades fiscalizadoras. En lugar  de seguir por su valle de lágrimas, si realmente es el presidente municipal que está representando los intereses de todo Chilpancingo, le sugerimos que se deje de lloriqueos y se ponga a trabajar con inteligencia y  creatividad como la primera autoridad. Lo que hemos estado leyendo, escuchando y viendo a la distancia de 52 días es que no tenemos a un presidente municipal en la capital del estado de Guerrero, ni un hombre con autoridad echado para adelante, sino a una verdadera “Magdalena”, lo mismo están repitiendo sus colaboradores en sus respectivas oficinas, constatado por nuestro equipo de investigaciones especiales. De continuar con esta postura de lloriqueos, lo único que tendremos es un Gobierno Municipal del fracaso y nos va a queda a deber a la gente el “Cambio”. Parece qué  no está entendiendo perfectamente bien Gaspar Beltrán, que la política es un arte, no es un juego o el de ahí se va, por lo tanto está a tiempo de reaccionar que no es el “Reyecito”, en que no acepta señalamientos de la prensa, mucho menos de sus colaboradores a quienes por cierto los recrimina severamente cuando le hacen observaciones constructivas. Ante esta postura belicosa, muchos están decidiendo, ya no opinar nada de sus aciertos y desaciertos, simplemente se están concretando a cumplir con un horario de trabajo y resolver los problemas dentro de lo posible. En estos 52 días, repetidamente ha venido  llorando Gaspar Beltrán, “Si no hay un rescate financiero del gobierno federal habrá un colapso en el Ayuntamiento de Chilpancingo y no se podrán pagar salarios a los 3 mil 250 trabajadores”. Con este tipo de discursos no se gobierna, eso debe entenderlo el alcalde Antonio Gaspar Beltrán. “Clama auxilio” ante el quebranto financiero que enfrenta. Esto, a decir del alcalde, ya se lo hicieron saber al presidente electo Andrés Manuel López Obrador en su casa de transición en la Ciudad de México, donde entregó un oficio en el que explica las condiciones del municipio de Chilpancingo y también debe saberlo y que no sea ingenuo, el futuro presidente que en ocho días estará asumiendo el poder, no trae la varita mágica. “En el tema del rescate financiero es un déficit que está ahogando a la administración municipal, un déficit de 20 millones de pesos mensuales, si no hacemos algo, si no propiciamos el rescate financiero estaremos observando un colapso en las finanzas municipales que no tardará mucho en verlo y que esto representará estar en estado de insolvencia para el pago de nómina y para la administración municipal en su funcionamiento”, ese es Antonio Gaspar Beltrán, convertido en una verdadera plañidera, cuando se supone que los capitalinos elegimos a un presidente municipal que respondería con creces. Para justificar sus lloriqueos, dice que el pago de nómina representa un gasto de 32 millones de pesos mensuales para los 3 mil 250 trabajadores, sin embargo, enfrenta un déficit de 15 millones en el pago de salario cada mes. Para reactivar la infraestructura urbana del municipio necesita tres mil millones de pesos para realizar obras de agua potable, áreas recreativas y acciones por la seguridad. Gaspar Beltrán, luego escupe para arriba, afirmando “que el municipio cuenta con el apoyo del gobernador Héctor Astudillo Flores”, sin embargo utiliza doble discurso, al sostener que es al gobierno federal, a través de la Cámara de Diputados, a quien le corresponde analizar la situación del municipio y determinar si hay condiciones del rescate financiero. Parece que ya  sufre de temprano Alzheimer, Antonio Gaspar Beltrán, ya se olvidó que Chilpancingo, es Municipio  Libre y Soberano, se rige por el artículo 115 constitucional, eso debe conocerlo, supuestamente es licenciado en derecho. Entonces en lugar de lloriqueos sin que la sociedad sufra ese efecto, debería poner sus mejores oficios y ofrecer públicamente sus logros, para que se le reconozca públicamente. Y si realmente cuenta con el apoyo del Gobernador  su tocayo Héctor Antonio Astudillo Flores con quien anda de luna miel, entonces que lo convenza que necesita, el doble y triple ayuda, entendiendo de que aquí vive y tiene también sus intereses familiares y políticos. Por lo pronto le vamos a regalar  con motivo de fin de año un pañuelo  al “Tigre Toño”, antes de que se convierta en un gatito.…Audioinsolito…Por lo menos nosotros, no habíamos tenido la oportunidad de escuchar la voz de quien por más de 30 años fue presidente de México, el oaxaqueño conocido como Porfirio Díaz, pero en realidad  su nombre completo es José de la Cruz Porfirio Díaz Mori. A través del tiempo, y gracias a la tecnología, ahora los mexicanos tenemos la oportunidad de por lo menos escuchar su voz que grabó hace 109 años. Hoy en día, gracias a la magia de la tecnología y un oportuno pensamiento, hoy es posible escuchar la voz de Porfirio Díaz, personaje emblemático de la historia de México. ¡Insólito audio! Esta es la voz de Porfirio Díaz, la grabó hace 109 años.Porfirio Díaz destaca como uno de los personajes que escribió la historia de México, su presencia destaca durante la Intervención Francesa y su estancia por más de 30 años en el poder, además del desarrollo tecnológico que motivó en el país. Fue justo este aspecto el que permitió tener un registro de su voz, la cual grabó hace 109 años. De acuerdo con el periódico Excélsior, se trata de una grabación que realizó el entonces presidente de la República Mexicana en respuesta a una carta que recibió de Thomas Alva Edison, prolífico inventor del fonógrafo y la bombilla incandescente entre otros. El mensaje lo pronunció Díaz el 15 de agosto de 1909, desde Chapultepec, al agradecer a Edison el envío de uno de sus primeros fonógrafos, y un admirador y seguidor de los avances tecnológicos de la época.El mensaje, con duración menor a los dos minutos, se mantiene en el acervo de la Fonoteca Nacional. Aquí la grabación de Porfirio Díaz, de voz ahogada, a Thomas A. Edison. “Yo también como usted, recuerdo con placer el tiempo aquel en que tuve la satisfacción de conocerle, y conocer sus atrevidos experimentos, haciéndome partícipe de su fe inquebrantable en el grandioso porvenir de la ciencia empírica. (...) Me es grato complacerle porque tengo en muy alta estimación a los grandes benefactores de la humanidad, y usted es uno de ellos, porque usted ha creado nuevas fuentes de felicidad, de bienestar y de riqueza para el género humano utilizando las más poderosas fuerzas conocidas: luz, electricidad, trabajo y genio. Su amigo, que con orgullo estrecha su mano, Porfirio Díaz”.

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