viernes, 24 de mayo de 2019

NOTA CON FOTOS

Padre Cuenca:alejados
de Dios los que asesinan
Tino Gatica/Colaboración Especial.-El sacerdote de la catedral Asunción de María, Benito Cuenca Mayo nuevamente volvió a reencontrarse con uno de sus fieles, pero ahora finado: Marco Ivan Rodríguez Navarrete, a quien despidió con todos los auxilios espirituales, en una misa de cuerpo presente. Ayer jueves 23 de mayo, en pocas ocasiones, se había dado un último adiós a un habitante de este municipio de Chilpancingo, y singularmente esa despedida estuvo llena de muchas lamentaciones, lágrimas, con expresiones de una impotencia traducida en un “no es justo”.
Después de saberse la trágica noticia del desenlace que tuvo el secuestro del joven de 33 años de edad, Marco Iván Rodríguez Navarrete, empresario del ramo restaurantero y presidente del Club de Fútbol “Avispones de Chilpancingo”, de Tercera División profesional, ayer se le despidió con emotivas muestras de cariño, de am
or, no solamente de su familia encabezada por su padre Marco Antonio Rodríguez Canacasco, sino de toda una muchedumbre que se congregó en las instalaciones de la funeraria “Chilpancingo”, hasta el recorrido a la catedral “Asunción de María” así como se despedida final al panteón central, en donde quedaron sus restos morales, no así su legado y su memoria.
En su mensaje ante el cuerpo presente del malogrado empresario y promotor deportivo, el sacerdote Benito Cuenca Mayo mostró su pesadumbre, su propia manera de ver lo que está aconteciendo en nuestra sociedad actual ante esta situación de violencia. Retomó el padre Cuenca pasajes bíblicos de la muerte de Caín a manos de Abel, en donde el hermano asesina al hermano, añadiendo que “todo eso es doloroso, es triste ver que esas cosas sigan ocurriendo, más en gente que es joven, es emprendedora, leal, trabajadora…por eso siento que esas personas (que cometen estos delitos) se han alejado de Dios, por eso los exhorto a que reconsideren (esas acciones)”. Les pidió su arrepentimiento, además que las autoridades actuaran para dar respuesta a la petición de la gente por ese suceso.
En esos tres tiempos de una enorme tragedia por la pérdida física del empresario y promotor deportivo Marco Iván Rodríguez Navarrete, en su velatorio, la despedida de la catedral y el adiós final, se escucharon las porras de la “Penca de Maguey”, coros de jovencitos con playeras de “Los Avispones de Chilpancingo”, unas canciones de una banda de chile frito, y muchísimos comentarios, bajita la voz, exigiendo justicia ante ese homicidio.
Cabe mencionar que este joven había sido secuestrado, en esta ciudad de Chilpancingo, la noche del lunes 20, y encontrados sus restos mortales al día siguiente, siendo velado el miércoles 22 y sepultado ayer 23 de mayo, a las 17:00 horas, aproximadamente, despedido de toda su familia, y por decenas de conoció, ayudó y cobijó en toda su fructífera existencia.

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